La Real Academia de Bellas Artes expone una muestra que recupera para el público la figura del conde de Floridablanca
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
La Real Academia de Bellas Artes de San Fernando expone desde hoy hasta el 22 de febrero de 2009 una muestra que recupera para el público la figura de José Moñino y Redondo, más conocido por conde de Floridablanca, de quien el próximo 30 de diciembre se conmemora el segundo centenario de su fallecimiento.
La muestra, que lleva por título 'Floridablanca (1728-1808). La utopía reformadora', ha sido organizada por la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales (SECC); la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia; el Ayuntamiento de Murcia; la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y la Fundación Cajamurcia, a través de su Proyecto Huellas.
José Moñino y Redondo, Conde de Floridablanca, nació en Murcia en 1728 y falleció en Sevilla en 1808. Llegó a ser primer secretario de Estado durante dieciséis años en los reinados de Carlos III y Carlos IV.
La exposición, comisariada por el profesor Cristóbal Belda y que se inauguró en Murcia el pasado mes de septiembre, cuenta con un total de 175 obras de las que cuatro pinturas son de Goya: el retrato de Fernando VII, procedente del Museo Thyssen-Bornemisza; los retratos del conde de Floridablanca y de la Reina María Luisa, propiedad del Museo del Prado; y el retrato de Vargas Ponce, que llega de la Academia de la Historia.
Otros artistas presentes en esta exposición son Batoni -con su retrato de Pío VI, cedido por la Pinacoteca Comunale di Cesena-; Mengs -del que se exhibe el retrato de María Luisa de Parma, cedido por el Museo del Prado-; Ferro -con su Declaración de Guerra a Inglaterra procedente del Museo de Pontevedra; y Bayeu, Vergara, Houasse, Flaugiers y Giaquinto.
LA VIDA DEL ILUSTRE MURCIANO
Según explicó hoy el comisario, 'Floridablanca (1728-1808), la utopía reformadora' recuerda, a través de dibujos, documentos, pinturas, porcelanas, libros, joyas y esculturas, el nacimiento del conde de Floridablanca, el entorno familiar y los primeros estudios en Murcia y Orihuela; los años de abogado en la Corte; el inicio de su actividad política; el nombramiento como embajador en Roma y más tarde la obtención del título de conde de Floridablanca; sus años de primer ministro; las profundas reformas que llevó a cabo; su política científica y artística y el papel como protector de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.
La exposición da a conocer además la caída de Floridablanca y su retiro en Murcia, los años de prisión en la ciudadela de Pamplona, el perdón real, el retorno a la política en la Junta murciana y en la Junta Suprema Central y su muerte en Sevilla en 1808.
"La muestra cuenta los 80 años de vida del conde de Floridablanca y, sobre todo, su vinculación con la Real Academia de Bellas Artes", incidió el comisario quien resaltó el "gran impulso a la sección de arquitectura y a las artes" que dio José Moñino en esa institución.
Asimismo, Cristóbal Belda se refirió al conde de Floridablanca como el "ejemplo de hombre hecho a sí mismo" y recordó que no nació aristócrata sino que consiguió llegar a obtener los más altos títulos y distinciones (grande de España, infante, alteza serenísima, jefe de Estado...) gracias a su "gestión de Gobierno, que le llevó a participar en los asuntos más importantes y problemáticos de la Corona española, desde Extremo Oriente hasta las Indias".
Belda hizo hincapié además en la "modernidad", en lenguaje político, que se vivió durante la época del conde de Floridablanca, con "ideas llamativas y sorprendentes" referentes a la reforma de la enseñanza y la Universidad y el interés por el conocimiento científico o por las bellas artes, entre otros asuntos. Junto a esta parte llena de luces, este adalid de la Ilustración vivió también otras contradicciones que configuraron las sombras de su gobierno. En cualquier caso, el comisario destacó que Floridablanca puede ser considerado como "defensor de la libertad de España".
UN PERSONAJE DESCONOCIDO
La presidenta de la SECC, Soledad López, calificó al conde de Floridablanca de "hombre clave de la Ilustración cuya aportación, con el impulso de grandes reformas, fue fundamental".
Por su parte, tanto Enrique Ujalbón, director general de Bellas Artes y Bienes Culturales de la Región de Murcia, como Fátima Barnuevo, consejera de Cultura del Ayuntamiento murciano, se refirieron a José Moñino como "el murciano más universal" aunque llamaron la atención sobre el "desconocimiento" de su figura que tiene el público en general.
Creador de la Junta Suprema de Estado (precedente del actual Consejo de Ministros), del Banco de San Carlos (antecedente del Banco de España) o de infraestructuras hídricas como el Canal Imperial de Aragón, Floridablanca "conecta" en estas y otras materias con los temas que hoy están de actualidad, apuntó Fátima Barnuevo.
OTRAS OBRAS DE LA EXPOSICIÓN
En esta exposición se exhiben también, entre otras piezas, una colección de monedas y medallas del siglo XVIII, pinturas propiedad del Museo de Versalles -como el retrato de Federico II de Prusia-, cristal de la Granja de Segovia, relojes de la Real Fábrica, piezas de porcelana del Retiro, Chelsea y de Meissen, y el paño de túmulo de las exequias de Floridablanca.
Las obras proceden de museos e instituciones de toda España y del extranjero como el Museo Nacional del Prado, Patrimonio Nacional, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Real Academia de la Historia, Museo de Bellas Artes de Sevilla, Archivo General de Simancas, Museo de Cerámica de Barcelona, Catedrales de Sevilla y Salamanca, Biblioteca Nacional, Museo de Artes Decorativas de Madrid, Universidades de Santiago, el Museo Carnavalet de París, Museo di San Martino de Nápoles, Museo Storico Archeologico di Santarcangelo de Rimini y la Pinacoteca Comunale de Cesena.
José Moñino y Redondo, Conde de Floridablanca, nació en Murcia en 1728 y falleció en Sevilla en 1808. Llegó a ser primer secretario de Estado durante dieciséis años en los reinados de Carlos III y Carlos IV.
La exposición, comisariada por el profesor Cristóbal Belda y que se inauguró en Murcia el pasado mes de septiembre, cuenta con un total de 175 obras de las que cuatro pinturas son de Goya: el retrato de Fernando VII, procedente del Museo Thyssen-Bornemisza; los retratos del conde de Floridablanca y de la Reina María Luisa, propiedad del Museo del Prado; y el retrato de Vargas Ponce, que llega de la Academia de la Historia.
Otros artistas presentes en esta exposición son Batoni -con su retrato de Pío VI, cedido por la Pinacoteca Comunale di Cesena-; Mengs -del que se exhibe el retrato de María Luisa de Parma, cedido por el Museo del Prado-; Ferro -con su Declaración de Guerra a Inglaterra procedente del Museo de Pontevedra; y Bayeu, Vergara, Houasse, Flaugiers y Giaquinto.
LA VIDA DEL ILUSTRE MURCIANO
Según explicó hoy el comisario, 'Floridablanca (1728-1808), la utopía reformadora' recuerda, a través de dibujos, documentos, pinturas, porcelanas, libros, joyas y esculturas, el nacimiento del conde de Floridablanca, el entorno familiar y los primeros estudios en Murcia y Orihuela; los años de abogado en la Corte; el inicio de su actividad política; el nombramiento como embajador en Roma y más tarde la obtención del título de conde de Floridablanca; sus años de primer ministro; las profundas reformas que llevó a cabo; su política científica y artística y el papel como protector de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.
La exposición da a conocer además la caída de Floridablanca y su retiro en Murcia, los años de prisión en la ciudadela de Pamplona, el perdón real, el retorno a la política en la Junta murciana y en la Junta Suprema Central y su muerte en Sevilla en 1808.
"La muestra cuenta los 80 años de vida del conde de Floridablanca y, sobre todo, su vinculación con la Real Academia de Bellas Artes", incidió el comisario quien resaltó el "gran impulso a la sección de arquitectura y a las artes" que dio José Moñino en esa institución.
Asimismo, Cristóbal Belda se refirió al conde de Floridablanca como el "ejemplo de hombre hecho a sí mismo" y recordó que no nació aristócrata sino que consiguió llegar a obtener los más altos títulos y distinciones (grande de España, infante, alteza serenísima, jefe de Estado...) gracias a su "gestión de Gobierno, que le llevó a participar en los asuntos más importantes y problemáticos de la Corona española, desde Extremo Oriente hasta las Indias".
Belda hizo hincapié además en la "modernidad", en lenguaje político, que se vivió durante la época del conde de Floridablanca, con "ideas llamativas y sorprendentes" referentes a la reforma de la enseñanza y la Universidad y el interés por el conocimiento científico o por las bellas artes, entre otros asuntos. Junto a esta parte llena de luces, este adalid de la Ilustración vivió también otras contradicciones que configuraron las sombras de su gobierno. En cualquier caso, el comisario destacó que Floridablanca puede ser considerado como "defensor de la libertad de España".
UN PERSONAJE DESCONOCIDO
La presidenta de la SECC, Soledad López, calificó al conde de Floridablanca de "hombre clave de la Ilustración cuya aportación, con el impulso de grandes reformas, fue fundamental".
Por su parte, tanto Enrique Ujalbón, director general de Bellas Artes y Bienes Culturales de la Región de Murcia, como Fátima Barnuevo, consejera de Cultura del Ayuntamiento murciano, se refirieron a José Moñino como "el murciano más universal" aunque llamaron la atención sobre el "desconocimiento" de su figura que tiene el público en general.
Creador de la Junta Suprema de Estado (precedente del actual Consejo de Ministros), del Banco de San Carlos (antecedente del Banco de España) o de infraestructuras hídricas como el Canal Imperial de Aragón, Floridablanca "conecta" en estas y otras materias con los temas que hoy están de actualidad, apuntó Fátima Barnuevo.
OTRAS OBRAS DE LA EXPOSICIÓN
En esta exposición se exhiben también, entre otras piezas, una colección de monedas y medallas del siglo XVIII, pinturas propiedad del Museo de Versalles -como el retrato de Federico II de Prusia-, cristal de la Granja de Segovia, relojes de la Real Fábrica, piezas de porcelana del Retiro, Chelsea y de Meissen, y el paño de túmulo de las exequias de Floridablanca.
Las obras proceden de museos e instituciones de toda España y del extranjero como el Museo Nacional del Prado, Patrimonio Nacional, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Real Academia de la Historia, Museo de Bellas Artes de Sevilla, Archivo General de Simancas, Museo de Cerámica de Barcelona, Catedrales de Sevilla y Salamanca, Biblioteca Nacional, Museo de Artes Decorativas de Madrid, Universidades de Santiago, el Museo Carnavalet de París, Museo di San Martino de Nápoles, Museo Storico Archeologico di Santarcangelo de Rimini y la Pinacoteca Comunale de Cesena.