Las emisiones de CO2 crecieron casi dos puntos y se disparan hasta el 52,3%
01/10/2010 - 09:45
El nuevo incremento de 1,8 puntos es la estimación anual que elaboran CCOO y la edición española de la revista medioambiental World Watch. Oficiosa, sí, pero muy fiable.
La de 2007 constituye un triste récord negativo para España. Ha sido un muy mal año, récord absoluto de emisiones de España en su historia, precisó José Santamarta, director de World Watch España.
Los culpables de este nuevo disgusto son, sobre todo, el sector de generación eléctrica, que consumió un 8,8% más de carbón y un 4,3% de gas para las plantas del ciclo combinado - el consumo de petróleo apenas subió un 0,7% debido a sus altos precios-, junto con el transporte; por carretera creció un 3% y un 5% el avión.
España entra en las peores condiciones en la fase de cumplimiento obligado de los acuerdos de Kioto, de 2008 a 2012. Dentro de cuatro año España debería emitir sólo un 15% más de CO2 y demás gases de efecto invernadero de los que vertió en 1990, año de referencia del tratado. Con un exceso de casi 33 puntos sobre ese tope y el fracaso hasta ahora de las estrategias gubernamentales, deshacerse a tiempo de ese lastre es misión imposible.
Así las cosas, sólo queda pagar. Kioto permite compensar los excesos de CO2 de un país con la compra de derechos de emisión a otros países menos contaminantes, y con mecanismos de flexibilidad como inversiones en energías limpias en países en desarrollo. Pero eso costará mucho dinero, entre 3.500 y 4.000 millones de euros de aquí a 2012, que no habría que desembolsar si el Gobierno hubiera hecho las cosas bien. Los fondos, para variar, saldrán del bolsillo de los consumidores, asegura Santamarta, un 60% vía impuestos y el resto a través de la tarifa eléctrica.
Renovables
Para el 2008 las expectativas sobre las emisiones no son más optimistas el Gobierno no va a hacer nada probablemente porque ni quiere ni sabe, afirma- aunque, paradójicamente, la crisis económica y el barril del petróleo por las nubes pueden echar un mano y contener algo los vertidos de CO2. El único dato positivo per se que destaca el informe es la evolución de las energías renovables. España es el tercer país en potencia instalada tras Alemania y EE UU.
Los culpables de este nuevo disgusto son, sobre todo, el sector de generación eléctrica, que consumió un 8,8% más de carbón y un 4,3% de gas para las plantas del ciclo combinado - el consumo de petróleo apenas subió un 0,7% debido a sus altos precios-, junto con el transporte; por carretera creció un 3% y un 5% el avión.
España entra en las peores condiciones en la fase de cumplimiento obligado de los acuerdos de Kioto, de 2008 a 2012. Dentro de cuatro año España debería emitir sólo un 15% más de CO2 y demás gases de efecto invernadero de los que vertió en 1990, año de referencia del tratado. Con un exceso de casi 33 puntos sobre ese tope y el fracaso hasta ahora de las estrategias gubernamentales, deshacerse a tiempo de ese lastre es misión imposible.
Así las cosas, sólo queda pagar. Kioto permite compensar los excesos de CO2 de un país con la compra de derechos de emisión a otros países menos contaminantes, y con mecanismos de flexibilidad como inversiones en energías limpias en países en desarrollo. Pero eso costará mucho dinero, entre 3.500 y 4.000 millones de euros de aquí a 2012, que no habría que desembolsar si el Gobierno hubiera hecho las cosas bien. Los fondos, para variar, saldrán del bolsillo de los consumidores, asegura Santamarta, un 60% vía impuestos y el resto a través de la tarifa eléctrica.
Renovables
Para el 2008 las expectativas sobre las emisiones no son más optimistas el Gobierno no va a hacer nada probablemente porque ni quiere ni sabe, afirma- aunque, paradójicamente, la crisis económica y el barril del petróleo por las nubes pueden echar un mano y contener algo los vertidos de CO2. El único dato positivo per se que destaca el informe es la evolución de las energías renovables. España es el tercer país en potencia instalada tras Alemania y EE UU.