Libros e ilustraciones con el trasfondo de la noche se dan cita en la Biblioteca
01/10/2010 - 09:45
Por: MAR GATO. MADRID
La exposición permanecerá abierta al público hasta el último día de junio
Tras recorrer algunas ciudades de España, el palacio de Dávalos ha dado la bienvenida esta semana a las exposiciones del XXXII Salón del Libro Infantil y Juvenil organizado por el Consejo Nacional del Libro Español, evento que viene desarrollándose desde tiempo inmemorial durante las fechas navideñas en la cercana Madrid.
Bajo el título Leer y mirar la noche, el patio central de la institución bibliotecaria alberga una serie de estanterías que permiten exponer de cara más de 800 libros, 200 de ellos versados sobre la noche, el núcleo central de todas las piezas expuestas, y diversas novedades editoriales destinadas al público infantil y juvenil.
Hasta el momento, y pese a llevar tan sólo unos pocos días expuesta, la respuesta del lector ha sido todo un éxito, que no da dudado en disponerse a leer en el luminoso patio algunos de sus fragmentos e, incluso, solicitarlo en préstamo, opción que, sin embargo, no está disponible por ser objetos de exposición. Por este motivo, la directora de la Biblioteca, Blanca Calvo, anima a los usuarios a encontrar esos títulos entre los fondos de la Biblioteca; de no ser posible, les remite a su solicitud para incluirlos en las futuras adquisiciones de la institución. No obstante, Calvo agotará todas las posibilidades para que la donación de los mismos a la Biblioteca de Guadalajara sea una opción posible cuando finalice su periplo itinerante. Con ello se engrosarían en los fondos infantiles y juveniles de que dispone la Biblioteca, contribuyendo a dar un empujón a la lectura infantil.
Esta exposición de libros se completa con dos exposiciones sobre ilustración que se localizan en la galería superior de la Biblioteca, posición espacial desde la que se observa la magnitud de las obras que componen la exposición central, la libresca.
En esta eventual sala de exposiciones se suceden una serie de ilustraciones del valenciano Arnal Ballester, Premio Nacional de Ilustración en 2008, y de otros tantos y diversos ilustradores. Esta magnífica obra gráfica, al igual que la exposición de libros, permanecerá abierta al público hasta el 30 de junio. Sin embargo, a partir del lunes cambiará su ubicación, desplazándose a la sala de lectura infantil y juvenil, que se estrena en las lides de ser un espacio expositivo.
Echar la vista atrás
Esta múltiple exposición tiene sus similitudes con la que la Biblioteca realizó en los primeros años de los 80, época en la que la institución comenzó a realizar sus primeras actividades destinadas al público infantil, y en la que acogió una exposición del Ministerio de Cultura que trajo hasta la capital la ingente cifra de libros de 1.111. Aquella, como se espera con ésta, incentivó sobremanera la lectura entre los más pequeños.
Hasta el momento, y pese a llevar tan sólo unos pocos días expuesta, la respuesta del lector ha sido todo un éxito, que no da dudado en disponerse a leer en el luminoso patio algunos de sus fragmentos e, incluso, solicitarlo en préstamo, opción que, sin embargo, no está disponible por ser objetos de exposición. Por este motivo, la directora de la Biblioteca, Blanca Calvo, anima a los usuarios a encontrar esos títulos entre los fondos de la Biblioteca; de no ser posible, les remite a su solicitud para incluirlos en las futuras adquisiciones de la institución. No obstante, Calvo agotará todas las posibilidades para que la donación de los mismos a la Biblioteca de Guadalajara sea una opción posible cuando finalice su periplo itinerante. Con ello se engrosarían en los fondos infantiles y juveniles de que dispone la Biblioteca, contribuyendo a dar un empujón a la lectura infantil.
Esta exposición de libros se completa con dos exposiciones sobre ilustración que se localizan en la galería superior de la Biblioteca, posición espacial desde la que se observa la magnitud de las obras que componen la exposición central, la libresca.
En esta eventual sala de exposiciones se suceden una serie de ilustraciones del valenciano Arnal Ballester, Premio Nacional de Ilustración en 2008, y de otros tantos y diversos ilustradores. Esta magnífica obra gráfica, al igual que la exposición de libros, permanecerá abierta al público hasta el 30 de junio. Sin embargo, a partir del lunes cambiará su ubicación, desplazándose a la sala de lectura infantil y juvenil, que se estrena en las lides de ser un espacio expositivo.
Echar la vista atrás
Esta múltiple exposición tiene sus similitudes con la que la Biblioteca realizó en los primeros años de los 80, época en la que la institución comenzó a realizar sus primeras actividades destinadas al público infantil, y en la que acogió una exposición del Ministerio de Cultura que trajo hasta la capital la ingente cifra de libros de 1.111. Aquella, como se espera con ésta, incentivó sobremanera la lectura entre los más pequeños.