Los colegios están preparados para recibir a los alumnos

El delegado de la Junta, Eusebio Robles, y el delegado de Educación, Ángel Francisco Fernández Montes, han visitado hoy el colegio Cardenal Mendoza de la capital donde, acompañados por su director, Andrés Corral, han podido conocer el plan desarrollado por este centro para afrontar el nuevo curso en las necesarias condiciones de seguridad y prevención frente a la Covid-19.

El centro está ya preparado para recibir a los alumnos, se están terminando los últimos detalles. Las medidas son visibles desde la entrada, donde se han marcado con colores y flechas los itinerarios de acceso que cada curso debe seguir. Las líneas de colores continúan por pasillos y escaleras, un camino de ida y otro de vuelta, para intentar que los alumnos mantengan la distancia de seguridad.

Los espacios se han reorganizado. La mayoría de los grupos de Primaria se han desdoblado para reducir el número de alumnos en las aulas habituales, y los que se mantienen se han trasladado a espacios más amplios, como la biblioteca o la sala de psicomotricidad, que han sido reconvertidos en aulas. Hay dispensadores de gel hidroalcohólico en distintos puntos, y un bote en cada aula.

La distribución del comedor también ha cambiado. Habrá dos turnos y en cada mesa se colocarán dos comensales.

Estas son las señales visibles que nos dicen que este curso será diferente, pero el objetivo es que no deje de ser presencial. Así lo han subrayado tanto el delegado de la Junta como el de Educación.

RAM-Covid

Además, el Cardenal Mendoza ha sido uno de los centros incluidos este año en lo que se ha denominado plan RAM-Covid (obras de reforma, ampliación y mejoras para adaptar los centros a las normas marcadas por la autoridad sanitaria). En este caso, se ha asfaltado el patio, una obra demandada por los padres.

Eusebio Robles ha explicado que gracias a este plan extraordinario se han llevado a cabo un total de 87 actuaciones en 44 centros de la provincia, intervenciones que se suman a las realizadas dentro del Plan RAM ordinario, con 77 obras de 36 centros. Todo ello por un importe de 1.2 millones de euros.

La adaptación de espacios es una de las claves del nuevo curso, ha explicado Robles, para garantizar la distancia interpersonal de metro y medio, pero también se han tomado otras medidas organizativas. Algunas de ellas son la de crear “grupos burbuja”, “grupos estables de alumnos para que las relaciones ente ellos sean menores y eso nos permita tenerlos muy localizados en caso de contagio”; la contratación de más profesores (3.000 en toda la región), y la realización de pruebas PCR a todo el personal docente y otros trabajadores de los centros. De momento, se prevé que el curso comience sin bajas por Covid entre el profesorado.

En el caso de que aparezca algún caso de Covid en el centro se dibuja un segundo escenario, el de semipresencialidad. En este sentido, el delegado ha destacado el plan de digitalización realizado por el Gobierno regional y la nueva plataforma Educa-CLM. En la provincia de Guadalajara, el primero se materializa en 9.200 dispositivos, portátiles, tabletas, router, o tarjetas telefónicas, para garantizar el acceso de todo el alumnado a las nuevas tecnologías.

Finalmente, el delegado de la Junta ha hecho un llamamiento a toda la comunidad educativa para afrontar este curso, porque “es necesaria implicación y complicidad de todos los agentes, profesores, alumnos y familias”.

Planes adaptados a cada centro

El Delegado de Educación ha reconocido y agradecido el esfuerzo realizado por todo el personal de los centros para diseñar los planes de inicio de curso adaptados a sus particularidades, y dirigiéndose a padres y madres les ha tranquilizado señalando que “a veces puede dar la sensación de que no se está trabajando, pero es todo lo contrario, se está trabajando muy silenciosamente para tener todo preparado y cuando está todo listo se transmite”.

“Los planes de inicio pretenden prevenir y garantizar que estamos ofreciendo una educación de calidad, y que podamos controlar si existe algún brote”, ha indicado. Los pilares de estos planes son limitación de contactos, medidas de higiene personal, ventilación y limpieza de centros y gestión de casos.

Además de la reorganización de despachos y aulas y de los grupos burbuja, se van a sectorizar los espacios para que cuando surja un caso sospechoso se puede localizar y controlar con mayor facilidad, ha explicado Fernández Montes. En cuanto a las medidas de higienes, se van a repartir dos mascarillas por alumno y profesor, de más de 50 lavados; se ha dotado a los centros de dispensadores de hidrogel, de dos termómetros digitales, y de papeleras con tapa, principalmente para la sala de aislamiento de Covid, y los alumnos se tendrán que lavar las manos en reiteradas ocasiones a lo largo de la jornada lectiva.

Ante posible casos, las acciones tomadas pasan por la designación de un responsable Covid, que va a ser el interlocutor con los servicios sanitarios. Además, el equipo directivo y los profesores van a estar formados y se ha puesto una sala de aislamiento. En caso sospechoso se avisa a la familia y a los servicios sanitarios y serán estos los que determinen las pautas a seguir.

En cuanto a la posibilidad de que algún instituto pudiera impartir educación semipresencial a partir de tercero de la ESO, el delegado de Educación ha indicado que se está dando solución a los casos más complicados y espera que en todos se pueda seguir el curso de forma presencial. En este sentido ha subrayado que centros y Delegación están haciendo un gran esfuerzo. Cada centro deberá adaptarse a sus posibilidades y en algunos es posible que se hagan turnos y algunos se trasladen a la tarde (todavía se están presentando solicitudes). En todo caso, “enviar a los chicos a su casa es lo último, tenemos que buscar la posibilidad de que la enseñanza sea presencial”, ha insistido Fernández Montes.