Los danzantes tomarán las calles este sábado

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: Redacción
GALVE DE SORBE
Las fiestas comenzaron ayer y se alargarán hasta este domingo
Ayer mismo comenzaron los primeros actos encuadrados dentro del programa de fiestas de Galve de Sorbe con la celebración de varias competiciones deportivas y juegos infantiles que tendrán continuidad durante el día de hoy. Mañana tendrá lugar un pasacalles a partir de las 9.00 horas con los Gaiteros Mirasierra y, a las 12.30, una misa con procesión por las calles del pueblo. Y a partir de la 1.00 horas, la Orquesta Mabelon arrancará su verbena.
El sábado, danzantes y gaiteros darán el toque de diana a las 9.00 y a las 12.00 habrá una nueva misa seguida de procesión a la ermita de la Virgen del Pinar con acompañamiento de los Danzantes y Zarragón. A las 19.00 los danzantes volverán a actuar en la plaza Mayor con los Gaiteros de Mirasierra y el grupo Dance de Tauste de Zaragoza; y a la 1.00 Boomerang será quien se encargue de animar la verbena. Por último, el domingo, de las 12.00 a las 14.00 y de las 17.00 a las 20.00 se celebrará un Parque Infantil.

En Galve de Sorbe, el centro de la fiesta son los Danzantes y Zarragón, declarados de Interés Turístico Provincial, que se celebra el tercer sábado de agosto. Se han mantenido vivas danzas cuyos pasos ejecutan los bailadores con palos, castañuelas y cintas. En el repertorio de danzas de Galve prima el paloteo, es decir, los danzantes van provistos cada uno de dos palos que entrechocan con los del compañero o entre sí. Este tipo de manifestación folclórica es muy frecuente en Castilla, aunque se extendió por otras regiones.

El origen de las danzas de Galve es desconocido. La tradición oral ha ido transmitiendo la fiesta durante la generación, hasta llegar a nuestros días, sin apenas alteraciones salvo en las características del atuendo. Herrera Casado, cronista oficial de Guadalajara, opina que “la raíz celtíbera y guerrera se encuentra en las danzas de Galve, igual que en las de Molina, Valverde o Utande”.

La cristianización de la península influyó en todo tipo de expresiones culturales y artísticas. Las danzas de Galve no fueron una excepción. El antiguo ceremonial, cuya idea motriz era agradecer la deidad de los dioses paganos, fue adoptado, absorbido y transformado por el cristianismo en una fiesta, plenamente imbuida de religiosidad.