Los diez piratas liberados en alta mar después de asaltar el petrolero ruso podrían haber muerto
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
Los diez piratas que fueron liberados la semana pasada en alta mar después de asaltar el petrolero ruso 'Universidad de Moscú' en el Golfo de Adén no han llegado todavía a tierra y podrían haber muerto, según informaron este martes fuentes militares rusas.
Un alto responsable del Ministerio ruso de Defensa ha asegurado, citado por las agencias de noticias Itar-Tass e Interfax, que los piratas no han desembarcado en ningún punto y probablemente hayan muerto. El Ministerio no se ha pronunciado al respecto.
Los piratas, según la misma fuente, fueron despojados de sus armas y equipo de navegación a unas 300 millas náuticas de la costa y fueron instalados en una de las lanchas fuerabordas que habían utilizado en el secuestro.
El 'Universidad de Moscú' se dirigía a China con 23 tripulantes rusos a bordo y un cargamento de petróleo valorado en 52 millones de dólares. El petrolero fue liberado por un buque de la Armada rusa. Durante la operación de rescate murió un pirata y fueron capturados otros diez, que fueron posteriormente liberados en altamar porque no había bases legales para juzgarlos en Rusia.
Tras el incidente, el presidente de la Federación Rusa, Dimitri Medvedev, lamentó la falta de avances por parte de la comunidad internacional para garantizar la persecución judicial de los piratas.
Los piratas, según la misma fuente, fueron despojados de sus armas y equipo de navegación a unas 300 millas náuticas de la costa y fueron instalados en una de las lanchas fuerabordas que habían utilizado en el secuestro.
El 'Universidad de Moscú' se dirigía a China con 23 tripulantes rusos a bordo y un cargamento de petróleo valorado en 52 millones de dólares. El petrolero fue liberado por un buque de la Armada rusa. Durante la operación de rescate murió un pirata y fueron capturados otros diez, que fueron posteriormente liberados en altamar porque no había bases legales para juzgarlos en Rusia.
Tras el incidente, el presidente de la Federación Rusa, Dimitri Medvedev, lamentó la falta de avances por parte de la comunidad internacional para garantizar la persecución judicial de los piratas.
