Los documentos de la Biblioteca Nacional serán restaurados
01/10/2010 - 09:45
Los 11 documentos robados (entre mapas y láminas de diferentes libros raros o incunables) de la Biblioteca Nacional (BN) y ya recuperados tardarán dos meses en ser restaurados, según se informó hoy durante la presentación a la prensa de los citados trabajos de este departamento.
La directora del la BN, Milagros del Corral, apuntó que hasta ahora nadie, excepto los funcionarios que trabajan en el laboratorio de restauración, habían tenido acceso a este recinto que constituye el sancta sanctorum de la institución.
Del Corral recordó que de las 16 láminas robadas (se detectó la sustracción en agosto de 2007) pertenecientes a 11 libros se han recuperado 11 y quedan otras cinco, dos de las cuales se cree que nunca se encontrarán porque quizás el ladrón las haya destruido, declaró la directora de la BN quien adelantó que las otras tres posiblemente se hallen en una colección privada.
Asimismo, señaló también que tras consultar con expertos de otros países, se ha optado por hacer visible la mutilación y dejar constancia de las huellas de este robo en cada una de las obras afectadas. Esto se hace para compatibilizar las necesidades de conservación con la historia del ejemplar, de la que no puede sustraerse el hecho del expolio, apuntó Arsenio Sánchez (restaurador de Fondo Raro e Incunable).
Las alteraciones realizadas tras el hurto -recorte de márgenes, adición de notas, sellos y ex libris y de reparaciones de baja calidad técnica- forman ya una unidad formal y personalizan los ejemplares. Por ello, la Biblioteca Nacional mantiene la postura de que, aunque se trata de falsificaciones y alteraciones dolosas, deben permanecer con la obra como un testimonio de su pasado. La unión se realizará por medio de técnicas fácilmente identificables y totalmente reversibles.
Ladrón confeso
César Gómez Rivero, de 60 años, ciudadano español de origen uruguayo y residente en Argentina es el ladrón confeso -como lo definió Del Corral- de todas estas láminas, robadas a lo largo de dos años y medio de la BN y que ya cuenta con antecedentes por delitos de esta misma naturaleza.
La directora de la BN recordó que cuando entregó parte del material robado fue procesado por fraude en grado de tentativa por haber querido vender en el mercado negro estas piezas.
Del Corral recordó que de las 16 láminas robadas (se detectó la sustracción en agosto de 2007) pertenecientes a 11 libros se han recuperado 11 y quedan otras cinco, dos de las cuales se cree que nunca se encontrarán porque quizás el ladrón las haya destruido, declaró la directora de la BN quien adelantó que las otras tres posiblemente se hallen en una colección privada.
Asimismo, señaló también que tras consultar con expertos de otros países, se ha optado por hacer visible la mutilación y dejar constancia de las huellas de este robo en cada una de las obras afectadas. Esto se hace para compatibilizar las necesidades de conservación con la historia del ejemplar, de la que no puede sustraerse el hecho del expolio, apuntó Arsenio Sánchez (restaurador de Fondo Raro e Incunable).
Las alteraciones realizadas tras el hurto -recorte de márgenes, adición de notas, sellos y ex libris y de reparaciones de baja calidad técnica- forman ya una unidad formal y personalizan los ejemplares. Por ello, la Biblioteca Nacional mantiene la postura de que, aunque se trata de falsificaciones y alteraciones dolosas, deben permanecer con la obra como un testimonio de su pasado. La unión se realizará por medio de técnicas fácilmente identificables y totalmente reversibles.
Ladrón confeso
César Gómez Rivero, de 60 años, ciudadano español de origen uruguayo y residente en Argentina es el ladrón confeso -como lo definió Del Corral- de todas estas láminas, robadas a lo largo de dos años y medio de la BN y que ya cuenta con antecedentes por delitos de esta misma naturaleza.
La directora de la BN recordó que cuando entregó parte del material robado fue procesado por fraude en grado de tentativa por haber querido vender en el mercado negro estas piezas.