Los profesores interinos volverán a manifestarse el jueves por las calles de Guadalajara

La asamblea de interinos docentes de Guadalajara ha presenado las nuevas medidas de presión contra la Consejería de Educación, Ciencia y Cultura encaminadas a acabar con los recortes presupuestarios anunciados por la administración.
    Por el momento, la asamblea cuenta con el apoyo sindical de USO y del Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza (STE), aunque uno de sus miembros, Tomás Sancho, no descrata que “otros sindicatos se sumen a estas protestas próximamente”.
    Además de denunciar los recortes en enseñanza, así como la precariedad laboral del profesorado interino y de reivindicar su estabilidad laboral, los miembros de la asamblea presentaron sus próximas movilizaciones. La primera actividad tendrá lugar el jueves y consistirá en una nueva manifestación por las calles de la capital para exigir la estabilidad de los interinos. Comenzará a las 19.00 horas desde las puertas de la Delegación de Educación y continuará en dirección a la Subdelegación del Gobierno. Hace sólo unas semanas, la asamblea convocaba la primera manifestación de estas características, a la que acudieron más de 200 personas.
    La segunda acción de protesta la realizarán la próxima semana y consistirá en el buzoneo de 50.000 folletos informativos “en las principales localidades de Guadalajara para dar a conocer a los padres y las madres la repercusión de los recortes en educación”, argumentó Sancho. Guadalajara, Cabanillas, Azuqueca y Alovera son los municipios en los que se distribuirán los ejemplares informativos.
    Una vez más, las reclamaciones se fundamentan en dos pilares fundamentales. Por una parte, los docentes se proponen derogar el artículo 20 de la ejecución presupuestaria de Castilla-La Mancha de 28 de enero de 2011. En este artículo se establece que sólo se contratarán “los profesores imprescindibles para el próximo curso”. Este hecho supondría, para la asamblea, “la pérdida de entre un 20 y un 30 por ciento de puestos de trabajo de interinos y una precarización del sistema educativo”.  Además, la asamblea tampoco está de acuerdo con el hecho de que “se cuestione la antigüedad de los docentes cuando en cualquier empresa es un aspecto muy valorable”. A partir de ahora, según señalan, valdrá más la nota obtenida en la oposición que se convoca cada dos años que la experiencia. “Es como si en una empresa cada dos años se hiciera un examen y en función de los resultados se echara a unos, se quedaran con unos pocos y contratarán a otros nuevos”.
    Los miembros de la asamblea también critican “los recortes presupuestarios en los centros de enseñanza de un 10 por ciento”. Esta minoración de la inversión y la falta de estabilidad de los interinos “se reflejarán en la calidad de la educación”, apunta Tomás Sancho, quien considera que “presupuesto hay y éste debe invertirse en los pilares básicos de la educación y la sanidad”.