Otegi abandona la cárcel y ejerce de líder de Batasuna

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: Redacción
Arnaldo Otegi abandonó ayer, sobre las siete y media de la mañana, la prisión guipuzcoana de Matutene pletórico y arropado y jaleado por los principales dirigentes de Batasuna y la izquierda ‘abertzale’ que quedan en libertad.
Otegi, como si nada hubiese ocurrido en los 15 meses que lleva encarcelado, recuperó con naturalidad su papel de portavoz de Batasuna para reclamar al Gobierno «diálogo y negociación» como único camino para resolver el «problema político» vasco y alcanzar «un escenario de paz y democracia» en Euskadi.
El dirigente independentista, que respondió en francés con un «ya se verá» a la pregunta de si volverá a ser el rostro del partido ilegalizado, obvió en sus declaraciones los efectos sobre la política española de la ruptura de la tregua y el punto de no retorno provocado por el atentado de la T-4, y volvió a plantear como fórmula válida para alcanzar la paz la doble mesa de negociación. Mostró su convencimiento en que la resolución de los problemas políticos en el País Vasco sólo puede llegar en un escenario que «le permita decidir su futuro y, al mismo tiempo, dentro de ese proceso, se libere a todos los presos» de ETA y su entorno.
Su mensaje tardó pocos minutos en caer en saco roto. El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, en tono contundente, respondió que «no hay posibilidad de retomar el diálogo» con ETA o con las organizaciones ‘satélites’ porque «todas las puertas se han cerrado» con la vuelta a los atentados y los asesinatos. «No hay ninguna posibilidad de negociar con la izquierda ‘abertzale’», remarcó, antes de aclarar que «la única posibilidad» de Otegi y del resto de líderes de ese mundo es «convencer a la banda terrorista ETA para que abandone las armas» de manera definitiva.
El PP, por si acaso, dio un toque de atención al Gobierno y a los socialistas. Su secretaria general, Dolores Cospedal, declaró que confiaba en que «la palabra de no negociar políticamente con ETA se cumpla». La dirigente opositora dijo que, para asegurarse de que el Ejecutivo no rompe la condición que ha permitido recuperar el consenso antiterrorista, los populares estarán «vigilantes» y no permitirán que José Luis Rodríguez Zapatero se salga esa la línea, que es la que conduce «a la derrota de ETA».