Pedro Ruiz clausura con un absoluto éxito de participación los XXII Encuentros Culturales
01/10/2010 - 09:45

Por: Redacción
TRILLO
El polifacético Pedro Ruiz fue el encargado de poner el broche a la vigésimo segunda edición de los Encuentros Culturales de la Central Nuclear de Trillo. El éxito de participación de público se acompañó del éxito de una conferencia en la que Ruiz volvió a manifestar su independencia absoluta y ofreció su crítica más dura hacia la sociedad de hoy en día, cargada de manipulaciones. Con la ponencia de Ruiz se consumaba la programación cultural de los Encuentros, que ha contado este año también con la presencia de la torera Cristina Sánchez y Lucio.
El gran comunicador Pedro Ruiz fue el encargado de clausurar el pasado jueves la vigésimosegunda edición de los Encuentros Culturales de la Central Nuclear de Trillo con una exposición abierta en la que dejó patente, una vez más, su independencia absoluta y su crítica más amarga hacia la sociedad de hoy en día y la manipulación que a su juicio se proyecta desde los medios de comunicación. Un artista que ha sido censurado, vetado, reconocido, denostado, perseguido y también querido a nivel mediático y que ha logrado triunfar en todos los géneros en los que ha desarrollado su actividad, tal y como subrayó Juan Carlos Fernández, responsable de Relaciones Institucionales de la planta trillana.
Hombre poco dado a las pleitesías y gran defensor de la libertad individual por encima de devoción alguna, Pedro Ruiz no tardó en granjearse la simpatía del numeroso público que llenó el salón de actos de la Residencia de la Central, fomentando un encuentro cercano, sincero y familiar en el que el protagonista, fiel a su estilo, habló sin remilgos y suscitó continuos aplausos entre los presentes, quienes quisieron premiar así su buena disponibilidad y acertadas palabras.
Con un título tremendamente ilustrativo de su conferencia, Testigo de la farsa, el artista se mostró consciente de la fama de prepotente que a veces le ha perseguido, si bien aseguró aceptarla aún cuando no la comparta: Ser uno mismo en paz es el único éxito que realmente hay en la vida. Por ello, denunció esta farsa, el decorado en el que todos vivimos, marcado por los tópicos y, sobre todo, por lo conveniente, al tiempo que reivindicó la individualidad de cada uno como paso previo a su realización real, por encima de aquello que determinan otros.
Dentro de este escenario, criticó duramente el papel de los medios de comunicación que, lejos de informar, sólo promueven la manipulación y la mentira, así como fomentan una sociedad del odio en la que rehusó participar. Un mundo que tiene estos ejemplos, difícilmente tendrá buenos resultados, lamentó. A su juicio, desde hace mucho tiempo, los peores de la clase son los que nos están dando la lección, en base a un espectáculo acordado de antemano.
Pese a la reciente publicación de su décimo tercer libro, Al hijo que no tengo, Pedro Ruiz se definió por encima de todo un hombre de teatro dado que ha sido en ese ámbito donde más cómodo se ha sentido y donde ha podido desarrollarse con mayor libertad. Precisamente, actualmente recorre los escenarios españoles con su obra Escándalo en Palacio, una ácida crítica a esa clase política de la que, aseguró, siempre se ha desligado. Hay mucha gente limpia, pero no son los que mandan, sentenció.
Por último, no dudó en rebelarse contra el bipartidismo impuesto en la sociedad actual y alentado por unos medios de comunicación en los que ha desaparecido la independencia. No os dejéis manejar como autómatas, ni seáis móviles del odio de los demás, aconsejó a los presentes, defendiendo la propia individualidad aún cuando ésta no sea compartida por el resto o implique pagar un alto precio. Al final, pese a ello, vivirás más cómodo y te ahorrarás muchos problemas internos.
Tercero y último
Con Pedro Ruiz se clausuró una nueva edición de los Encuentros Culturales de Trillo, que en este 2010 han cumplido 22 años de exitosa trayectoria ligada a la de la Central Nuclear de Trillo.
El objetivo de estos Encuentros Culturales sigue siendo acercar a Trillo y a los pueblos del entorno la cultura a través de personas de reconocido prestigio que aportan sus conocimientos y experiencias en campos tan diversos como la ciencia, el arte, la historia, el deporte, el periodismo o la tauromaquía.
A lo largo de más de cuatro lustros más de 120 expertos, entre los que se encuentran escritores, historiadores, filósofos, académicos de las letras y de las artes, ganaderos, toreros, deportistas y artistas han pasado por el salón de actos de la Residencia de la Central Nuclear de Trillo, cuartel general de este encuentro y por el que se han acercado en estas dos décadas más de 8.000 espectadores.
Hombre poco dado a las pleitesías y gran defensor de la libertad individual por encima de devoción alguna, Pedro Ruiz no tardó en granjearse la simpatía del numeroso público que llenó el salón de actos de la Residencia de la Central, fomentando un encuentro cercano, sincero y familiar en el que el protagonista, fiel a su estilo, habló sin remilgos y suscitó continuos aplausos entre los presentes, quienes quisieron premiar así su buena disponibilidad y acertadas palabras.
Con un título tremendamente ilustrativo de su conferencia, Testigo de la farsa, el artista se mostró consciente de la fama de prepotente que a veces le ha perseguido, si bien aseguró aceptarla aún cuando no la comparta: Ser uno mismo en paz es el único éxito que realmente hay en la vida. Por ello, denunció esta farsa, el decorado en el que todos vivimos, marcado por los tópicos y, sobre todo, por lo conveniente, al tiempo que reivindicó la individualidad de cada uno como paso previo a su realización real, por encima de aquello que determinan otros.
Dentro de este escenario, criticó duramente el papel de los medios de comunicación que, lejos de informar, sólo promueven la manipulación y la mentira, así como fomentan una sociedad del odio en la que rehusó participar. Un mundo que tiene estos ejemplos, difícilmente tendrá buenos resultados, lamentó. A su juicio, desde hace mucho tiempo, los peores de la clase son los que nos están dando la lección, en base a un espectáculo acordado de antemano.
Pese a la reciente publicación de su décimo tercer libro, Al hijo que no tengo, Pedro Ruiz se definió por encima de todo un hombre de teatro dado que ha sido en ese ámbito donde más cómodo se ha sentido y donde ha podido desarrollarse con mayor libertad. Precisamente, actualmente recorre los escenarios españoles con su obra Escándalo en Palacio, una ácida crítica a esa clase política de la que, aseguró, siempre se ha desligado. Hay mucha gente limpia, pero no son los que mandan, sentenció.
Por último, no dudó en rebelarse contra el bipartidismo impuesto en la sociedad actual y alentado por unos medios de comunicación en los que ha desaparecido la independencia. No os dejéis manejar como autómatas, ni seáis móviles del odio de los demás, aconsejó a los presentes, defendiendo la propia individualidad aún cuando ésta no sea compartida por el resto o implique pagar un alto precio. Al final, pese a ello, vivirás más cómodo y te ahorrarás muchos problemas internos.
Tercero y último
Con Pedro Ruiz se clausuró una nueva edición de los Encuentros Culturales de Trillo, que en este 2010 han cumplido 22 años de exitosa trayectoria ligada a la de la Central Nuclear de Trillo.
El objetivo de estos Encuentros Culturales sigue siendo acercar a Trillo y a los pueblos del entorno la cultura a través de personas de reconocido prestigio que aportan sus conocimientos y experiencias en campos tan diversos como la ciencia, el arte, la historia, el deporte, el periodismo o la tauromaquía.
A lo largo de más de cuatro lustros más de 120 expertos, entre los que se encuentran escritores, historiadores, filósofos, académicos de las letras y de las artes, ganaderos, toreros, deportistas y artistas han pasado por el salón de actos de la Residencia de la Central Nuclear de Trillo, cuartel general de este encuentro y por el que se han acercado en estas dos décadas más de 8.000 espectadores.