PSOE C-LM hace autocrítica y dice que no supo transmitir "un relato verosímil de la naturaleza de la crisis"

09/01/2012 - 19:01 Europa Press


El PSOE de Castilla-La Mancha ha hecho autocrítica asegurando que ni en el partido ni en el Gobierno se supo transmitir "un relato verosímil de la naturaleza de la crisis y su repercusión sobre la región", lo que hizo que un sector del electorado "se cegara en el espejismo de que lo importante era que las elecciones autonómicas sirvieran para adelantar la caída del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero".

Según se recoge en la ponencia marco de cara al X Congreso regional del partido consultada por Europa Press, cuando llegó la crisis tanto el Gobierno como el partido "apenas pudieron presentar un proyecto que fuera más allá de defender lo conseguido", algo que aunque era necesario "no fue bastante para dinamizar las energías de la región".

En el documento, los socialistas aseguran que la causa principal de la derrota radica en que "faltó esencialmente la activación del sector potencialmente más influyente de una mayoría pro-gubernamental y pro Barreda capaz de traducir en mayoría de votos la opinión mayoritaria de que Barreda era mejor que Cospedal".

DESUNIÓN PSOE ESPAÑA/CASTILLA-LA MANCHA

La ponencia argumenta que tanto el PSOE de España como de Castilla-La Mancha "no fueron capaces de articular una respuesta conjunta a la estrategia del PP ni unir sus fuerzas para la batalla clave" en la región.

"La lógica y defendible diferenciación del presidente Barreda respecto al presidente Zapatero, fue planteada y vista sólo como distanciamiento, y este se convirtió en nueva palanca para aumentar y consolidar la idea de que la clave de todo era acabar con el gobierno de Zapatero". Pese a ello, los socialistas señalan que han perdido el Gobierno "pero no la dignidad". "Y bien alto podemos decir que después de tres décadas de gobiernos socialistas ni un alto cargo ha sido juzgado por corrupción, aunque las acusaciones provenientes del PP hayan sido insistentemente reiteradas", añade el texto.

Para los socialistas, la construcción de un partido fuerte en la oposición "resultará una tarea ardua" porque se ha sufrido "una dura derrota política", pero al acometer esta tarea el partido debe saber "que no se ha sufrido una derrota moral, y que el candidato socialista José María Barreda salió de la presidencia con aprecio mayoritario y reconocimiento popular".