Renuncia el ministro argentino de Economía
01/10/2010 - 09:45
El ministro de Economía de Argentina, Martín Lousteau, presentó su renuncia al Gobierno, informaron hoy a Efe fuentes oficiales.
Lousteau presentó su dimisión anoche al jefe del gabinete de ministros, Alberto Fernández, dijeron portavoces del Ministerio de Economía sin hacer más comentarios.
Otras fuentes del Gobierno confirmaron a Efe que la dimisión de Lousteau fue aceptada por la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, quien designó a Carlos Fernández al frente de la cartera Económica.
La mandataria está reunida con sus colaboradores en la residencia presidencial de Olivos, a las afueras de Buenos Aires, apuntaron los portavoces.
Fernández, un economista del gobernante Partido Justicialista (peronista) especializado en finanzas públicas, estaba hasta ahora al frente de Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), el organismo recaudador de impuestos.
Señalado como un funcionario cercano al ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007), también estuvo al frente del Ministerio de Economía de la provincia de Buenos Aires entre marzo y diciembre del año pasado.
Las fuentes consultadas por Efe indicaron que Lousteau dimitió después de que la jefa del Estado rechazó una propuesta suya para frenar la inflación, que incluía medidas para "enfriar" la economía argentina, que desde el 2003 crece a una tasa superior al ocho por ciento anual en promedio, luego de la severa recesión sufrida entre 1998 y 2002.
El Gobierno de Fernández, quien asumió el 10 de diciembre pasado, niega que el país sufra un rebrote de la inflación, como alertan consultoras y economistas en momentos en que se duda de las estadísticas oficiales.
Martín Loustau, de 36 años, uno de los más jóvenes ministros de Economía de la historia de Argentina, reconoció el martes que el país tiene que lograr una inflación "moderada y previsible" para evitar que impacte sobre la distribución del ingreso.
Su dimisión fue aceptada en medio de negociaciones con las principales asociaciones agropecuarias del país, que han declarado una "tregua" de 30 días a una huelga de 21 días que suspendieron el 2 de abril pasado y que causó desabastecimiento y un alza de los precios de los alimentos.
La huelga de las asociaciones agropecuarias, que en conjunto reúnen a unos 290.000 productores de todo tamaño, se desató a raíz de un nuevo sistema impositivo puesto en marcha por Lousteau el 11 de marzo último y que encareció las exportaciones de soja y girasol.
La mayor presión del fisco sobre el campo avivó antiguas reclamaciones de ganaderos y productores lecheros, quienes rechazan las regulaciones del Gobierno.
En los últimos días hubo rumores de enfrentamientos de Lousteau con el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, a quien los productores agropecuarios atribuyen presiones e intransigencia en las negociaciones para superar el conflicto.
Otras fuentes del Gobierno confirmaron a Efe que la dimisión de Lousteau fue aceptada por la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, quien designó a Carlos Fernández al frente de la cartera Económica.
La mandataria está reunida con sus colaboradores en la residencia presidencial de Olivos, a las afueras de Buenos Aires, apuntaron los portavoces.
Fernández, un economista del gobernante Partido Justicialista (peronista) especializado en finanzas públicas, estaba hasta ahora al frente de Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), el organismo recaudador de impuestos.
Señalado como un funcionario cercano al ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007), también estuvo al frente del Ministerio de Economía de la provincia de Buenos Aires entre marzo y diciembre del año pasado.
Las fuentes consultadas por Efe indicaron que Lousteau dimitió después de que la jefa del Estado rechazó una propuesta suya para frenar la inflación, que incluía medidas para "enfriar" la economía argentina, que desde el 2003 crece a una tasa superior al ocho por ciento anual en promedio, luego de la severa recesión sufrida entre 1998 y 2002.
El Gobierno de Fernández, quien asumió el 10 de diciembre pasado, niega que el país sufra un rebrote de la inflación, como alertan consultoras y economistas en momentos en que se duda de las estadísticas oficiales.
Martín Loustau, de 36 años, uno de los más jóvenes ministros de Economía de la historia de Argentina, reconoció el martes que el país tiene que lograr una inflación "moderada y previsible" para evitar que impacte sobre la distribución del ingreso.
Su dimisión fue aceptada en medio de negociaciones con las principales asociaciones agropecuarias del país, que han declarado una "tregua" de 30 días a una huelga de 21 días que suspendieron el 2 de abril pasado y que causó desabastecimiento y un alza de los precios de los alimentos.
La huelga de las asociaciones agropecuarias, que en conjunto reúnen a unos 290.000 productores de todo tamaño, se desató a raíz de un nuevo sistema impositivo puesto en marcha por Lousteau el 11 de marzo último y que encareció las exportaciones de soja y girasol.
La mayor presión del fisco sobre el campo avivó antiguas reclamaciones de ganaderos y productores lecheros, quienes rechazan las regulaciones del Gobierno.
En los últimos días hubo rumores de enfrentamientos de Lousteau con el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, a quien los productores agropecuarios atribuyen presiones e intransigencia en las negociaciones para superar el conflicto.