Rodríguez asegura que el Plan de Finanzas no afectará a las obras en ejecución

20/01/2011 - 13:30 M.T.A

La portavoz del Gobierno regional, Isabel Rodríguez, ha presentado esta mañana en Guadalajara, junto a la delegada de la Junta, Magdalena Valerio, el Plan de Consolidación de las Finanzas Públicas que aprobó el pasado martes el Consejo de Gobierno y que permitirá ahorrar 1.000 millones de euros.
“Este plan ha requerido mucho esfuerzo y concentración”
Este plan, según Rodríguez, que ha requerido “mucho esfuerzo y concentración” por parte de los miembros y departamentos del Gobierno regional se basa en dos premisas básicas: garantizar el modelo político y social y no exigir mayor esfuerzo a los empleados públicos. De esta forma, el plan se articula en torno al ahorro en gasto corriente y público, ingresos y transparencia.
En el capítulo de gasto corriente se incluye una nueva medida: la reprogramación de las inversiones. Esto supondrá que los planes de inversiones ampliarán su plazo de ejecución. De esta forma, por ejemplo, el plan de instalaciones deportivas se amplía del 2011 al 2013.“Con eso no tendremos que estar invirtiendo tanto dinero en esas obras, podremos tener liquidez para otros asuntos y el compromiso de mantener esas obras es evidente”, ha explicado. En este sentido, la portavoz ha precisado que las obras “sobre todo las importantes” que ya están programadas y licitadas continuarán con su plazo de ejecución, como la ampliación del Hospital Universitario, pero no se iniciarán obras nuevas, que se pospondrán para 2012 o 2013. En el caso del arreglo de Francisco Aritio, Rodríguez ha insistido en que este plan no le afectará “en absoluto”.
En las medidas de reducción del gasto se detallan también medidas para los empleados públicos para regular y controlar el absentismo que supondrá un ahorro de 2,5 millones; el cierre de los edificios públicos a las 17.00 horas; el ahorro de 123 millones de euros en gasto corriente por la implantación de la factura electrónica, la centralización de la concentración y la eliminación del papel. Los recortes afectarán también a las ayudas y subvenciones, que en unos casos se reducirán y en otros se eliminarán. De esta forma, desaparecen la financiación del gasto corriente que se incluía en el Forcol, que supondrá un ahorro de 41 millones de euros.
En el capítulo de ingresos se incluyen nuevos impuestos de forma que las compañías eléctricas tendrán que pagar un nuevo impuesto por la existencia de los parques eólicos, y se revisaré el impuesto sobre la energía nuclear. Además, se creará un nuevo impuesto para los bancos y entidades financieras en función del número de depósitos que tengan en la comunidad. Estas medidas, según Rodríguez, permitirán recaudar 200 millones de euros.
Este plan redundará además en la transparencia, por lo que la consejera de Economía y Hacienda comparecerá durante los 15 días siguientes al mes que concluya para dar cuenta de los gastos producidos. En definitiva, según Rodríguez, se trata de un plan “imaginativo y eficaz” que no afecta a las familias ni a las personas, sigue apoyando los servicios sociales y no exige un esfuerzo a los funcionarios.
Para la delegada de la Junta, se trata de un plan “muy potente” por lo que tiene que ser “muy conocido” y con el que se afronta “con valentía” la situación actual de crisis que estamos sufriendo. Valerio recordó que el presidente regional, José María Barreda, fue uno de los primeros en asumir esta situación “crítica” desde el punto de vista económico y empezó a adoptar medidas. “Hemos ido predicando con el ejemplo”, insistió.