Sanidad inicia el trámite del reglamento de prescripción por enfermeros
El Ministerio de Sanidad prepara un reglamento que determinará los
fármacos o tratamientos que podrán prescribir los enfermeros y que
comenzará este mismo mes la fase de consultas para su tramitación. Así
lo ha anunciado este miércoles ante la Comisión de Sanidad y Consumo del
Senado el secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos.
En concreto, esta normativa especificará "los criterios, requisitos y
condiciones" de los medicamentos que podrán prescribir también los
enfermeros dentro del grupo de fármacos que ahora sólo pueden prescribir
médicos, en base a las actuales guías de práctica clínica.
De esta lista de fármacos, que tendrá que ser acordada por médicos y
enfermeros y validada por la Agencia de Calidad del Sistema Nacional de
Salud (SNS), se excluirán --de acuerdo con la normativa europea-- los
que puedan presentar un peligro si se utilizan sin control médico.
Asimismo, no podrán ser prescritos por enfermeros los medicamentos
que tengan reacciones adversas, "que será necesario estudiar más
detalladamente", y los que se administren "por vía parenteral, salvo
casos excepcionales, por prescripción médica".
En este sentido, Martínez Olmos ha recordado que el enfermero está
facultado para poder indicar, usar y autorizar, de forma autónoma, la
dispensación "de los medicamentos no sujetos a prescripción médica y los
productos sanitarios" y que, en todo caso, el documento a emplear en
esta práctica "es la orden de dispensación y no la receta médica".
Por otra parte, a pregunta también de la senadora de CiU Rosa Nuria
Aleixandre, se ha referido a la supresión de la Dirección General de
Terapias Avanzadas y Trasplantes, cuyas atribuciones han pasado a manos
de la Secretaría General de Sanidad, que Martínez Olmos dirige.
Ha señalado que su secretaría se hará cargo "de todas las funciones"
que le correspondían a esta dirección general, pero que tendrá que
hacerlo "de forma más eficiente" por la austeridad de los presupuestos.
Según Martínez Olmos, la supresión de esta estructura supondrá a Sanidad
un ahorro anual "de casi 223.000 euros".