Sanidad quiere promover la igualdad de responsabilidades domésticas tras el nacimiento del bebé

18/10/2010 - 11:52 E.P.

El Ministerio de Sanidad y Política Social quiere promover entre las parejas la "corresponsabilidad dentro del entorno doméstico" para facilitar el "descanso y la recuperación de las mujeres" tras el nacimiento del bebé, según se desprende del borrador de la Estrategia Nacional de Salud Sexual y Reproductiva (ENSSR), que será debatido este lunes por las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS).

Dentro del texto, concretamente entre las líneas estratégicas específicas de la Estrategia de Salud Reproductiva, desarrolla un apartado sobre la participación de las mujeres y las parejas en el proceso reproductivo, que consta de quince recomendaciones donde, además de la "corresponsabilidad doméstica", se aconseja compartir las "tareas cotidianas" evitando que "las mujeres embarazadas o puérperas tengan sobrecarga de tareas y facilitando así que puedan tener el descanso necesario".

Asimismo, en el documento al que ha tenido acceso Europa Press, sugiere al hombre llevar a cabo iniciativas como evitar el consumo de alcohol u otras sustancias tóxicas para evitar el deseo de consumo en la mujer; proteger el "necesario" descanso de la gestante; y procurar que se adopten hábitos de alimentación definidos "para evitar la sobrecarga de trabajo de preparar diferentes menús".

Por otra parte, Sanidad propone una serie de acciones que pueden ayudar a que el padre pueda implicarse y realizar el acompañamiento adecuado a las mujeres en cada etapa del embarazo y nacimiento. En este contexto, plantea la posibilidad de desarrollar canales formales de participación; difundir estrategias en organizaciones sociales, ciudadanas y colectivos específicos; y, entre otras medidas, informar a la pareja sobre las necesidades especificas de la mujer.

"Interiorizar la paternidad"
En general, el objetivo principal es incorporar al hombre en la gestación, nacimiento y crianza de los hijos "interiorizando la paternidad", ya que, según afirma, su participación "es uno de los factores que refuerzan una infancia satisfactoria, saludable y feliz". Pretende, por tanto, que "hombres y mujeres sean efectivamente iguales en derechos y deberes" también en este ámbito.

"Los grandes cambios experimentados en España en los últimos años señalan como principios básicos la libertad e igualdad en las relaciones interpersonales y declaran la igualdad entre hombres y mujeres en todos los ámbitos de la vida", señala.

Al mismo tiempo, argumenta que "el concepto de paternidad actual abandona el papel tradicional de padre (sin cercanía ni ternura) y reclama un modelo en el adquiere un mayor protagonismo los hijos y las hijas en la vida de los padres".

Esta situación lleva al departamento que gestiona Trinidad Jiménez a incorporar, entre sus objetivos específicos de la Estrategia en Salud Reproductiva, la necesidad de "impulsar un cambio en los valores en torno a la maternidad y paternidad"; alegando que "tradicionalmente se concretan en exigencias inalcanzables para las madres en la tolerancia de una escasa implicación paterna".

Por lo tanto, "el fortalecimiento de la implicación del padre", considera Sanidad, debe ser una de las líneas principales de mejora en la atención perinatal en el Sistema Nacional de Salud (SNS), "debido a las importantes consecuencias para la salud de su pareja, el embarazo y el bebe", aunque, "no en sustitución de la figura materna", sino como "complemento" a una participación conjunta.

Por otra parte, el borrador de la ENSSR, que tiene como objetivo "establecer estrategias de actuación, programas y proyectos que estén enfocados directamente a la mejora de la salud sexual", incluye dentro del apartado promoción de la salud en el embarazo un apartado en el que recomienda evitar prácticas como la entrega de maletines con regalos de la industria como revistas, tetinas, chupetes y muestras, y contenido publicitario.

En definitiva, con esta estratégica Sanidad pretende ofrecer "una atención global, continuada, integral y de calidad" al proceso reproductivo dentro del SNS, reforzando la promoción de la salud, el bienestar y la autonomía de las embarazadas; potenciando el parto normal; mejorando las condiciones del nacimiento; promoviendo la salud y bienestar de estas mujeres; e impulsando acciones de formación, participación, coordinación, etc.

Dos comités de evaluación
La evolución y desarrollo en los servicios de salud de la ENSSR, que comenzará una vez haya sido aprobada en el CISNS, será vigilada por dos Comités de Seguimiento y Evaluación, compuestos por los Comités Institucionales y Comités Técnicos de Salud Sexual y de Salud Reproductiva, y estarán coordinados por el Observatorio de Salud de las Mujeres del Ministerio de Sanidad y Política Social.

Entre sus cometidos se encuentra la revisión, actualización y evaluación de la estrategia, que se realizará a los dos años de su puesta en marcha y, posteriormente, cada cuatro años. En este sentido se han diferenciado cuatro aspectos a verificar: funciones de perfeccionamiento o mejora en todo el proceso sanitario (local, autonómico y estatal); de rendimiento de cuentas y responsabilidades de lo realizado; de ampliación de miras para un conocimiento más global; y de fomento de la igualdad entre mujeres y hombres.

En el borrador sus autores destacan que este proceso "será complejo" por varias razones, aunque tiene presente sobre todo la "dificultad a la hora de obtener información homogénea de las comunidades autónomas". "En consecuencia, el proceso de evaluación tendrá el valor añadido de impulsar, entre las CCAA, la recogida de información en materia de salud sexual y salud reproductiva de forma consensuada y sistemática".