Sentido homenaje a Borlán
01/10/2010 - 09:45
Si por algo se caracterizó el último homenaje a Fernando Borlán en la capital fue por el emotismo que rodeó el acto. Un recuerdo que se produjo en la tarde de ayer en el salón de actos de la Biblioteca Pública de Dávalos, que completó su aforo para la ocasión. La primera en dirigirse al más del medio centener de presentes fue Blanca Calvo, directora de la Biblioteca, quien hizo un rápido pero pormenorizado recorrido por la figura de Borlán.
Un tipo raro y singular, acertó a definir Calvo, quien no dudó en recordar uno de los episodios más anecdóticos de su vida, cuando ganó con 60 años un premio de poesía juvenil. Una hazaña única sólo propia de una persona con grandes valores, una impronta que dejaría marcada en muchos de sus seguidores. "Físicamente hoy no está con nosotros, pero su palabra y versos sí lo están". Con estas palabras Calvo justificó la celebración de un acto que pretende mantener en el recuerdo al poeta, la única forma de sentirle vivo.
Con una no menos emotividad se dirigió a los asistentes Carlos Alba, responsable de la edición de las obras completas de Fernando Borlán. Con voz entrecortada por el sentimiento, Alba fue el encargado de hablar sobre la persona del gran poeta. "Todavía me cuesta expresar la herida que se queda cuando se va un amigo como Fernando", comenzaba diciendo. Una persona vital que lejos de perder la chispa de la vida, la mantuvo hasta el final y no sólo eso, avivaba las de los que se encontraban a su alrededor. Episodios de una vida de la que decía sentirse "asquerosamente feliz", recordaba nostálgico.
Tras el recuerdo más íntimo de la figura humana de Borlán, los alumnos del taller de poesía de la Biblioteca Pública recitaron algunos de sus poemas, englobados en tres bloques, los mismos en los que se dividió la temática de su obra: la poesía, el hombre y el amor, este último tema, el contenido central de sus odas a la vida.
Con una no menos emotividad se dirigió a los asistentes Carlos Alba, responsable de la edición de las obras completas de Fernando Borlán. Con voz entrecortada por el sentimiento, Alba fue el encargado de hablar sobre la persona del gran poeta. "Todavía me cuesta expresar la herida que se queda cuando se va un amigo como Fernando", comenzaba diciendo. Una persona vital que lejos de perder la chispa de la vida, la mantuvo hasta el final y no sólo eso, avivaba las de los que se encontraban a su alrededor. Episodios de una vida de la que decía sentirse "asquerosamente feliz", recordaba nostálgico.
Tras el recuerdo más íntimo de la figura humana de Borlán, los alumnos del taller de poesía de la Biblioteca Pública recitaron algunos de sus poemas, englobados en tres bloques, los mismos en los que se dividió la temática de su obra: la poesía, el hombre y el amor, este último tema, el contenido central de sus odas a la vida.