Un nuevo vallado será el siguiente paso y el más visible hacia el nuevo campus

La Universidad de Alcalá de Henares ha sacado a licitación las obras para vallar el recinto de lo que será el nuevo campus universitario de Guadalajara, en torno al antiguo colegio de Las Cristinas, en la calle Dos de Mayo, y la actual Escuela de Magisterio, en la calle Madrid. Los trabajos incluyen la demolición de la antigua casa del guarda y zonas deportivas anexas, lugar donde se construirá el aparcamiento subterráneo y un edificio de investigación.

La inversión prevista para estos trabajos asciende a 978.972 euros y se establece un plazo de ejecución de cuatro meses. Las empresas interesadas tienen hasta el 10 de septiembre para presentar ofertas, con lo que, previsiblemente, los trabajos podrían comenzar en los últimos meses de este año.

Se trata de la primera fase de ejecución de un ambicioso proyecto diseñado por la Universidad de Alcalá para convertir el espacio en un moderno campus universitario que incluirá, además de los espacios para la actividad docente y de investigación, un parking, pistas deportivas, un centro de congresos con capacidad para 500 personas y lo que en el futuro podría ser un jardín botánico, aprovechando la parte del parque del Coquín cedida por el Ayuntamiento. El aparcamiento, de unos 11.500 metros cuadrados construidos, distribuidos en tres plantas bajo rasante, tendrá una capacidad aproximada de 250 vehículos.

Según lo anunciado por la Universidad en marzo de este año, el grueso de los trabajos del nuevo campus se prevé para abril o mayo de 2021, y el fin de las obras para 2023.

El cerramiento perimetral de las parcelas que conformarán el campus universitario tiene como objetivo, según se detalla en el pliego de licitación, por un lado, mejorar la seguridad de las personas y de las instalaciones antes y durante las obras, y, posteriormente, ayudar al control de acceso y seguridad interior de los recintos, cuando este esté en funcionamiento. Por otro lado, se trata de delimitar el campus con una imagen unitaria y distintiva respecto al resto de su entorno.

La Universidad plantea conservar y restaurar ciertos elementos constructivos del cerramiento actual como manifestación “al exterior la decisión de la Universidad de conservar el carácter de las edificaciones docentes originales”. Por otro lado, se sustituirá la reja metálica actual por otra de trazado contemporáneo y mayor solidez, que “manifestará la voluntad de la Universidad de desarrollar un campus contemporáneo que integrará las preexistencias para respetar el carácter de esta zona de la ciudad”.

En cuanto a la casa del antiguo guarda, su demolición es necesaria para la construcción del aparcamiento subterráneo y la realización de las excavaciones arqueológicas previas, dado que en un primer estudio se han hallado restos que podrían ser de interés. Se trata de una edificio de dos plantas en el que residía el guarda del complejo del antiguo colegio, está ubicada en la confluencia de la parcela de Las Cristinas, la calle Dos de mayo y la parcela del CEIP Pedro Sanz Vázquez. Junto a la vivienda se localiza una zona delimitada de deporte al aire libre, compuesta por una serie de elementos metálicos para el uso deportivo sobre unas losas de hormigón, que también será demolida.