Uno de cada tres hipertensos está incorrectamente tratado

20/11/2010 - 17:38 Europa Press

Entre el 20 y 30 por ciento de la población en España está diagnosticada como hipertensa, si bien hasta un tercio de estos pacientes están "sobrediagnosticados y sobretratados" por culpa del síndrome de la bata blanca, que les provoca una subida de la presión arterial cuando van al médico. Así lo ha asegurado el jefe de Sección de Nefrología del Hospital Infanta Sofía de Madrid, Fernando de Álvaro, quien reconoce que, "en realidad, estos pacientes no son hipertensos", sino que presentan "subidas puntuales" que "luego no se confirman por otros medios".


El doctor De Álvaro ha participado esta semana en una jornada sobre el síndrome de bata blanca celebrada en su hospital con el objetivo de informar de este problema "frecuente entre la población" que obliga a los profesionales sanitarios a "identificar qué paciente tiene realmente hipertensión del que no la tiene. A todo el mundo le pasa de alguna manera", ha asegurado este experto en declaraciones a Europa Press, recordando que en ocasiones se han dado casos en que el paciente presenta una tensión de hasta 180-120 y "luego, cuando llegan a casa, bajan hasta 120-70". Además, no hay un perfil tipo en los que este síndrome sea más frecuente, sino que depende de "una personalidad más reactiva ante una situación", dándose a cualquier edad, tanto en hombres como en mujeres.


La hipertension es uno de los factores más importantes de riesgo y que más mortalidad causa, pero es necesario identificar otros factores añadidos como el colesterol alto, una insuficiencia renal ligera o microalbuminuria, "para saber si hay un riesgo importante de enfermedades cardiovasculares". El problema, según reconoce el doctor De Álvaro, es que la presión asistencial favorece que "no haya tiempo" para hacer un seguimiento adecuado, lo que provoca un "sobretratamiento" en pacientes que no lo necesitarían. Aunque muchos de los tratamientos habituales contra la hipertensión son bien tolerados, el efecto más frecuente que provoca en estos casos es que se baje la tensión arterial por encima de los valores normales, lo que "les hace la vida más miserable" a estos pacientes.


Pero, además, en otros casos la medicación puede provocar efectos secundarios múltiples, que pueden ir desde la aparición de edemas, ralentización del ritmo cardiaco, alteraciones en los lípidos, o impotencia, en el caso de los diuréticos y los betabloqueantes. Por ello, el objetivo es "coordinarse con Atención Primaria" para enseñar a los pacientes cuáles son los factores de riesgo, enseñarles a prevenirlo y, al mismo tiempo, obligarles a medirse la tensión en su casa para identificar el síndrome de la bata blanca. Del mismo modo, en el Hospital Infanta Sofía están promoviendo una iniciativa que puede ayudar a combatir este síndrome, ya que procuran que "el paciente nunca se le tome la tensión arterial delante del médico", sino en una habitación aislada en la que están distraidos.