No hay dos sin tres para un Depor que es aún más líder

07/09/2014 - 16:06 Rubén Martínez

Aunque los entrenadores se harten de repetir lo anecdótico de ser líder a estas alturas de competición, la realidad es que a nadie le amarga un dulce. Los jugadores empiezan a creérselo –se nota en la confianza– y comienza a brotar cierto optimismo en la parroquia morada. En menos de un mes ya hemos visto al conjunto de Salvachúa desenvolverse utilizando además diferentes registros.

Despachó con significativa solvencia a Las Palmas, remontó a domicilio ante el Conquense y ganó sufriendo, sí no hay que rasgarse las vestiduras por decirlo, ante un aguerrido Tudelano. Total, que con los pinchazos del Toledo y el Barakaldo, los morados se quedan solos al frente de la clasificación. No es casualidad que el Depor sea el único equipo del grupo que haya solventado sus tres primeros partidos con victorias. Nadie aguanta el pulso al Guadalajara.
 
Conocidos
Deportivo y Tudelano ya se habían visto las caras a mediados de agosto durante la pretemporada con victoria navarra por un contundente 3-0. Debió tomar nota Salvachúa porque esta vez iba a ser todo lo contrario. Empezó el duelo con varias novedades en la alineación. Manzano en el lateral izquierdo, Chema Mato retrasado a la posición de pivote y Javi Pérez como mediapunta al igual que Arroyo, dejando la posición de extremo izquierdo para Abel Molinero. No obstante hay cosas que nunca cambian, como Javi López y Toledo. Ambos se buscan, se saben primordiales y aglutinaron buena parte del caudal ofensivo local en los primeros compases.
Precisamente con ambos de protagonistas llegó la primera aproximación seria del cuadro morado cuando los más rezagados aún no se habían sentado en sus asientos. Asistencia del malagueño y remate del francés desviado a córner por Pagola. No tardó en llegar la réplica visitante en un disparo por Álex –gran ariete– que se perdió lamiendo el poste de la meta defendida por Toni Lechuga. Había dos partidos. Uno cuando el Depor era capaz de imprimir el ritmo alto que le convenía y otro, a bajas revoluciones, alternativa esta última más cómoda para el cuadro de Mandiola. En los momentos de aplatanamiento, surgió Manzano para sumarse al ataque y poner un buen par de balones al corazón del área pero ningunó encontró rematador.
 
Adversario compacto
Enfrente los blanquinegros, un equipo trabajado y trabajador. Su bandera es la fortaleza defensiva y arriba sacan tajada en cuanto bajas la guardia. Pudo ser el caso en el epílogo de la primera mitad. David Martín dejó solo a Álex y solo la manopla salvadora de Toni Lechuga evitó el disgusto. Antes de llegar al descanso, Javi López se puso el disfraz de Superlópez driblando a tres rivales como si fuera invisible y teniendo la última ocasión del primer tiempo.
El Guadalajara tenía el balón pero el Tudelano le planteaba un enfrentamiento poco amable y no se sentía cómodo. La aportación de Javi Pérez y las excepcionales acciones de Molinero completaban la ecuación de dominio general del cuadro alcarreño. Y para abrir huecos, los deportivistas se valían de las diagonales pero las coberturas del Tudelano eran constantes y no ofrecían fisuras. Sinceramente el Depor daba la sensación de estar atascado y tropezaba una y otra vez con la misma piedra. Encima se llevó un señor susto al estrellar Álex un balón en la cruceta en un disparo acrobático desde fuera del área. Ello terminó de espabilar al conjunto de Carlos Pérez Salvachúa.
El Guada aumentó sus pretensiones ofensivas y los buenos empezaron a asociarse cada vez con más peligro. Javi Pérez dio el primer aviso con un remate a bocajarro salvado por los pies de Pagola. Fue el preámbulo de la mejor jugada de la tarde, una combinación entre Molinero, Arroyo y Javi Pérez con disparo final de Toledo al muñeco. No cejó en su empeño el Deportivo hasta que el arreón desembocó en el 1-0 no sin polémica. El linier dio córner cuando parecía saque de puerta claro y en el lanzamiento de córner, Javi López la pone al segundo palo y entra Rangel como una exhalación batiendo al hasta entonces inconmensurable Pagola.
 
Guardar los muebles
De ahí hasta el momento de levantar los brazos en señal de victoria todavía hubo que sufrir. Toni Lechuga se ganó el sueldo en un libre directo de Ardanaz que amenzaba con convertirse en el empate y la expulsión de Javi Pérez obligó a los morados poner los cinco sentidos en conservar el resultado. La mejor manera de defender fue atacar. En fin, tres partidos, tres victorias y líderes en solitario. Buenos tiempos para la lírica...