Acabemos de una vez por todas

16/09/2012 - 00:00 Teresa Antequera


  Acabemos de una vez por todas con la maldita ley del aborto ya que aun hay una campaña antinatalista engañosa y perversa diciendo que la mujer puede hacer lo que quiera sobre su propio cuerpo y el del niño gestado, que puede interrumpir a su arbitrio el nacimiento de un nuevo ser; más humanidad por favor y menos egoísmo. La vida es sagrada y eliminar una vida es un crimen nefasto.

  Llamamos a las cosas por su nombre, abortar es matar violentamente a seres humanos que no tienen voz ni fuerza para defenderse. Es escalofriante convertirse en verdugos de inocentes, convertir a una madre en asesina de su propio hijo; rebajarse a tales determinaciones, embrutecerla de una manera tan vil, no tiene parangón.

  Cito una frase del conocido jurista italiano Baldasarre “Los llamados derechos inviolables, los derechos de la persona humana no deberían ser objeto de relativización, es decir, no pueden ser parte de la negociación política” y la Declaración de los Derechos del Niño aprobados unánimemente por la organización de las Naciones Unidas en el año 1959 “La humanidad debe al niño lo mejor que puede darle, (…) es obvio reconocer su derecho natural y primarios a la vida” Dejémonos de monsergas y respetemos la vida que sólo Dios la da y puede disponer de ella.