Apoyo necesario para el autónomo

Durante los primeros siete meses del año, 892 afiliados al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) echaron el cierre. No es un caso aislado. En el resto del país los autónomos descendieron en 100.510, al pasar de los 3.319.188 en diciembre de 2008 a los 3.218.678 en julio de 2009, lo que se traduce en una pérdida diaria de 500 trabajadores autónomos. Las cifras son preocupantes pues este decrecimiento supuso, en términos relativos, un descenso del -3 por ciento. Pero, además, este dato llega en un momento en el que se ha registrado un descenso consecutivo general del desempleo en nuestra provincia lo que hace deducir que la situación de los autónomos es aún más complicada debido a la crisis. De hecho, a pesar del crecimiento estacional del empleo los datos de afiliación al RETA no han experimentado grandes avances, más bien al contrario ya que desde enero Castilla-La Mancha ha perdido 3.889 autónomos. Si tenemos en cuenta que el tejido empresarial alcarreño se compone, especialmente, de pequeños empresarios y autónomos, no es de extrañar que estos índices resulten aún más alarmantes. Por eso, es necesario que desde el Gobierno y las distintas administraciones se refuercen los apoyos que en otras épocas se dieron a este colectivo favoreciendo la concesión de mayores líneas de crédito que reactiven esa economía y generen empleo. No son suficientes medidas temporales que sólo sirven para generar empleo de forma coyuntural sino que es necesario que se aprueben ciertas actuaciones, específicas para este sector, como sería el pago aplazado de impuestos, en particular el IRPF y el Impuesto a Sociedades si queremos que los autónomos sobrevivan.