Campaña de viabilidad invernal

En este otoño tan benévolo, climatológicamente hablando, resulta extraño pensar que el invierno llegará, no tardando mucho, y que con él las nevadas harán acto de presencia en nuestras tierras. Ante estas inclemencias, la previsión es el mejor remedio. El Plan de Vialidad Invernal de Castilla-La Mancha contará con un dispositivo de 460 trabajadores, 64 quitanieves, 12 camiones entendedores de sal y 11.000 toneladas de sal. El objetivo es conseguir minimizar los riesgos que la meteorología de la época supone para la conducción. Concretamente, el plan se centra en informar al usuario con la antelación suficiente, minimizar las perturbaciones al tráfico como consecuencia de las nevadas y evitar la formación de las placas de hielo. Estas situaciones dificultan la movilidad en las vías de Guadalajara. Muchas de ellas, sobre todo en las zonas de Molina, Sigüenza y la Sierra, presentan altitud suficiente para obligar a extremar la precaución por parte de los servicios de emergencia. Por ello, en nuestra provincia habrá 10 almacenes de acopio de sal, que además de la capital se habilitarán en Cifuentes, el Señorío o la Ciudad del Doncel. Sin embargo, la campaña tiene la vertiente preventiva, que pretende garantizar en la medida de lo posible que las carreteras sean transitables. Pero con contar con un buen dispositivo no es suficiente. Además hay que apelar a que la prudencia acompañe también a los conductores en sus desplazamientos. Tomando mínimas precauciones como evitar los viajes en momentos de temporal; consultar la web o el teléfono de información gratuito sobre el estado de la red antes de salir; llevar siempre en el vehículo cadenas; el depósito de gasolina lleno; ropa de abrigo y linterna; o rellenar el depósito antes de que el combustible llegue a la mitad –consiguiendo así más peso y agarre en el eje trasero y una reserva de calefacción en caso de emergencia–, se logra hacer más efectiva la campaña. El sentido común deben extenderse, además, a las próximas fechas navideñas, desechando del menú las bebidas alcohólicas cuando después haya que conducir. Aunque parezcan demasiadas recomendaciones, ninguna es superflua cuando hablamos de seguridad al volante.