Cáritas por el empleo

08/05/2012 - 00:00 Jesús Domingo


  Durante la última semana de abril, Caritas española presentó ante los medios de comunicación social su memoria 2011 del Programa Empleo. La crisis económica ha expulsado de sus lugares de trabajo a cinco millones de españoles. Caritas ha puesto su Programa Empleo al servicio de quienes más dificultades e inconvenientes tienen para encontrar un trabajo que les permita vivir de manera normalizada y estable.   En las sociedades rurales todos tenían siempre algo de hacer y de esa manera se subsistía, en las industrializadas, el empleo es el único modo de subsistencia para la inmensa mayoría de los ciudadanos. P

  or el contrario, el desempleo produce marginación, exclusión social, pobreza y abandono. Fenómenos que hasta la década de los ochenta el mundo rico desconocía. El cuarto mundo se ha instalado en nuestras sociedades y Caritas responde a este nuevo desafío que interpela a la Iglesia católica y la compromete.   Hoy mismo he contestado a una encuesta en la que pedían si estabas de acuerdo en que la Iglesia pague impuestos, como si se tratara de una entidad parásita.

  Pues bien, que nadie diga que la Iglesia no arrima el hombro contra la crisis, aquí tenemos un calro ejemplo, pero que nadie se escude tampoco en que Caritas ya cumple. El deber de promoción del bien común que pasa por la satisfacción del derecho al trabajo compromete a todas las administraciones, a los empresarios y a los bancos, y a la sociedad española en su conjunto. De ello depende la dignidad de millones de ciudadanos, la pervivencia de nuestro sistema social y la cohesión de la convivencia entre los españoles.