CCOO sobre Geacam

13/11/2012 - 00:00 Federación Agroalimentaria

 
 
  El día 30 de octubre de 2012 se consumó la barbarie. La dirección de Geacam firmó el preacuerdo con tres de las organizaciones que tienen representación legal entre los trabajadores de la empresa. En este preacuerdo, que el día 31 se convertió en acuerdo definitivo, se pactó el despido de 2.022 trabajadores. Se volvió a llevar a unas asambleas el día 31 para que los trabajadores asuman su propio sacrificio, se hagan el “harakiri”. No sólo vuelven a cometer esa maldad, sino que además el preacuerdo –ahora, ya acuerdo- empeora en relación al que propusieron en septiembre y que ya fue ratificado por los trabajadores, bajo la amargura del miedo. Igual que hoy, aunque con un poco menos de miedo.
 
  El tiempo, un mes más dando vueltas al asunto, ha hecho que la gente comprenda mejor lo que se les viene encima. Un mes más, un mes más de cotización, dos meses más de derecho a prestaciones por desempleo, cuando se les reconozca el mismo. Porque éste octubre ha sido el último mes. Se pide ese harakiri hoy, para que surta efectos mañana; nada más y nada menos.
 
  Se dice que hay tiempo para pensarlo hasta el lunes día 5 de noviembre, pero el día 1, “día de los difuntos”, ya estarán muertos laboralmente, ya les habrán dado de baja en la Seguridad Social, ya no serán trabajadores de Geacam con un “empleo estable de 12 meses”; ni mañana, ni quizá en el futuro, es decir, pasado mañana. Aquellos que están dispuestos a defender acuerdos que definen en la asamblea como “una mierda”, ellos sabrán lo que hacen y lo que dicen. Y sus consecuencias para los trabajadores y para Geacam.
 
  CCOO decimos lo mismo hoy que en septiembre: este acuerdo no puede firmarse por organizaciones sindicales de clase, no podemos justificar, avalar y propiciar decisiones políticas injustificadas e injustas, además de, a nuestro juicio, ilegales y fraudulentas. Pero no sólo a nuestro juicio. Porque el partido del Gobierno, el propio Gobierno, y alguna que otra organización firmante, ambas partes, han reconocido públicamente en los medios de comunicación que este ERE no superaba los filtros legales, que era nulo de pleno derecho, etc.
 
  Los servicios jurídicos de la JCCM tampoco lo veían; cuando alguien hace algo a sabiendas de que no es legal y además es un daño para terceros, podría llamársele prevaricación o algo así. Los voceros del partido del Gobierno nos han tildado de irresponsables. Si lo somos, será porque defendemos el empleo estable y de calidad, que parece que en este país ya no se lleva.
 
   Dicen que estamos anticuados, caducos, obsoletos, que más cosas; pero si lo dicen por lo que defendemos y por lo que peleamos, seguiremos siendo “irresponsables”. CCOO no amenazamos a nadie ni a nada. Advertimos desde el primer día que esto acabaría en los tribunales y así lo haremos. Si nos dan la razón, no pasa nada: todo de vuelta atrás y a seguir dialogando; y si no nos la dan, será porque no la tengamos. Pero estamos convencidos de que sí, sí nos asisten la razón, el sentido común y la legislación laboral vigente, por pésima que sea; que lo es.