Con cierta soberbia y falta de patriotismo

  El personaje que durante el tiempo que fue Ministro de Trabajo prometió 800.000 puestos de trabajo y lo que consiguió fue un millón más de parados, ahora, pienso que no por meritos propios, es comisario de la Competencia en la Comisión Europea, único representante español. Este personaje, lleva unos días haciendo declaraciones que no dejan en muy buena posición al Estado por el que está ocupando ese cargo. Tal vez ha olvidado que los problemas financieros por los que atraviesa el Gobierno de su país fueron provocados por su partido político.  

  Después de algunas de las declaraciones nada favorables, Almunia aceptó una ‘reunión de urgencia’ en La Moncloa, solicitada por el Presidente con un objetivo claro: mostrar al comisario de Competencia de la UE el “malestar del Gobierno con sus declaraciones en contra de los intereses de España”. El presidente echó en cara a Almunia que arrojara dudas sobre el sistema financiero español tras la reunión del Eurogrupo en la que se solicitó la ayuda a la banca: “La prima de riesgo continuaba marcando máximos históricos y Rajoy no entendía la postura de Almunia, que no hacía más que atacar a entidades españolas”. Con una España hundiéndose, Almunia recordó a Rajoy, parece que con un tono altanero, que las ayudas a España dependen de él.  

  El ex secretario general del PSOE recordó al presidente que, en su cargo como comisario europeo de Competencia, tiene la potestad de decidir sobre la concesión o no a España de ciertas ayudas económicas que se han solicitado. Tal vez si que alguna cosa dependa de él, pero lo que si está mostrando es un tono mezquino, con el que puede favorecer a intereses de su partido o a su persona, pero que con esta soberbia y falta total de patriotismo está provocando, aún más, la caída de España. Nada que ver con el patriotismo y los resultados que están demostrando y consiguiendo los deportistas españoles.