Cuadrar el círculo del gasto y del ahorro

21/01/2011 - 00:00 Redacción

En un momento en el que muchas voces se alzan para denunciar la insostenibilidad del sistema de las autonomías y en el que se ha reabierto el debate sobre la necesidad de modificar el modelo, el Ejecutivo castellano-manchego presentaba, esta semana, el Plan de Consolidación de Finanzas y Servicios Públicos que permitirá ahorrar casi 1.000 millones de euros. Se podría decir que es un paso que se queda a medio camino entre el inmovilismo de unas autonomías y la apuesta de otras en las que incluso se empiezan a escuchar las primeras apuestas que se centran en “grandes ajustes” en las cuentas públicas y en la eliminación de organismos, entidades y empresas públicas, además de una nueva definición de las competencias que comparten Estado, comunidades y ayuntamientos. En Castilla-La Mancha se busca la cuadratura del círculo y se pretenden ahorrar 775 millones de gasto con un plan eficaz e imaginativo que busca mejorar los ingresos y reducir el gasto, pero sin afectar a los servicios esenciales garantizando, de este modo, la educación, la sanidad y el bienestar social. Es cierto que todas las comunidades autónomas se encuentran en una situación similar, pero no todas están dando las mismas respuestas, y ante problemas similares el camino no es siempre coincidente. Mientras unas autonomías centran sus esfuerzos en apostar por más recortes a los funcionarios o empleados públicos; otras optan por recortar los servicios esenciales y otras por no aplicar la Ley de la Dependencia, el Plan de Consolidación de las Finanzas y los Servicios Públicos apuesta por la eficacia. Lo que pretende es generar ahorro lo que se traduce en una mejora de los ingresos, así como contiene medidas restrictivas en materia de gasto, potenciadoras de aspectos que lo que buscan es favorecer una mejor gestión y transparencia. El primer paso ya se ha dado, con una puesta clara que lo que busca es optimizar la gestión en Castilla-La Mancha.