Curiosidades de antaño y otros asuntos
04/11/2012 - 00:00
Ahora, para empezar a escribir unas líneas en esta hoja voy a hablar de curiosidades de antaño. Cuando vivíamos, todos o casi todos en el pueblo, me acuerdo, que cuando faltaba un mes para la fiesta de San Diego, ya nos íbamos preparando la ropa para la fiesta, bien fuera para comprar el género para hacernos los trajes, para estrenar ese mismo días, pues antes se iba a los sastres, bien fuera a Jadraque, Brihuega, etc. Para que te tomaran medida y aún más, que tenías que acudir más veces para probarte la ropa, creo que esto último lo entenderán ustedes, ya que antiguamente no se compraba la ropa hecha. A mí, me parece mentira cómo pasan los meses.
Parece que fue ayer la fiesta de Santa Ana, el día 26 de julio. Ahora voy a entrar un poco en algo que me suena a broma. Me acuerdo cuando se contaba, aquel cantar antiguo, que decía así: hay que ver, haya que ver mi abuelita la pobre que ropas usaba, creo yo, creo yo que de una de esas faldas salen lo menos dos. A decir verdad, pienso, que si las comparamos con las minifaldas de ahora podríamos sacar más de cinco. Las minifaldas suben, los escotes bajan, creo que por este camino llegan a juntarse, es bonito. Creo que esto último lo entenderían ustedes como un poco falto de contenido, pero para mí no le resto mucha importancia, ya que pienso, que hay que salir un poquito de lo que había o se presencia, en la pequeña pantalla, de poca convivencia entre unos y otros.
Qué bonito sería ver a las personas sonreír y hacerlo tú también. Repito una vez más, como ya lo hice en otros artículos anteriores, que hoy, en la situación que estamos a nivel económico, el paro y más cosas, creo que teníamos que estar lo más unidos posible para poder ir saliendo de este bache, ya que seamos de la forma de pensar que se sea, como verán ustedes casi no entro en lo más mínimo, en un color u otro. Nosotros los pensionistas, todos o casi todos no somos los que peor lo tenemos, unos con mejores pensiones, otros con ellas más cortas, pero todos vamos saliendo para adelante.
Yo creo que lo tiene peor la juventud, y más el que no tiene trabajo, o se ha quedado sin él, y las nuevas generaciones pero yo creo que, poco a poco, ya iremos saliendo de esto último. He conocido tiempos peores y yo mismo los he pasado. Deseando que nos embarquemos en un barco que nos conduzca a buen puerto y con un cordial saludo les deseo lo me.