De promesa a realidad

Ayer, esa intención se transformaba en algo palpable al iniciarse, esta semana, los primeros trabajos de mejora de la GU-932. Atrás han quedado los obstáculos que desde el pleno de febrero de 2007, en el que se aprobaba el Plan de Viabilidad, se han tenido que superar y que han demorado su consecución a lo largo de casi dos años. Pero, por fin, las máquinas han empezado a trabajar y la nueva era de Guadalajara da sus primeros pasos. La mejora en las infraestructuras se antojaba imprescindible para una provincia que ve en el turismo un salvavidas del entorno rural. Y muy consciente de ello, el actual equipo de Gobierno provincial ha puesto todo su empeño en que el plan no quedase olvidado en un cajón, para lo que tuvo que conseguir un consenso político y social. Ya lo dejó patente la presidenta de la Diputación en su toma de posesión el 27 de junio de 2007: “Sobre nuestra mesa tenemos ya proyectos tan ambiciosos como el Plan Integral de Carreteras” porque nadie “cuestiona la necesidad de mejorar nuestras vías de comunicación” y se comprometió ante los grupos políticos de la Corporación “a plasmar la acción de Gobierno en un plan estratégico de mandato que nos marque el camino”. Sin duda, en ese camino el Plan de Carreteras ha tenido un importante recorrido y ahora se hace realidad una promesa que viene a explicar el sentido de la Diputación como institución que tiene las funciones de apoyar, asistir y colaborar con los municipios para mejorar el bienestar de sus vecinos. Precisamente, un buen ejemplo del cumplimiento de ese principio es que serán 104 pueblos los beneficiados por el Plan, entre los que se encuentran los más alejados de la capital y los menos poblados. Sin duda una iniciativa de este calado supone un importante paso para el futuro.