De ver la Champions
Son las cuatro y cuarto, antes de llamar, hemos tenido más de una hora de investigación. La conclusión es clara, si queremos ver al Madrid en la Champions, tenemos que contratar con Orange, Total Chanel o Vodafone. Como somos usuarios de una de estas compañías, me armo de valor y me pongo en contacto con la misma.16:15 Primera llamada: me sale un asistente virtual, que me indica que si el servicio que pido es para este número, marque 1. Marco 1. Me sale un nuevo asistente virtual, que me indica que si el objeto de la llamada está relacionado con el servicio de televisión marque 1, si está relacionado con datos marque 2 y si está relacionado con el fijo marque 3. Marco 1. Me piden que tecleé uno a uno, sin espacios y sin letras, el número del DNI del titular. Marco 123456789. Nueva grabación que dice que si quiero contratar el servicio de fútbol por 6 al mes que marque 1, si quiero otro servicio que espere. Marco 1. Me pregunta que si estoy seguro marque 1, si quiero volver atrás marque 0 (empiezo a rebotarme).Marco1. La alocución dice: Su servicio ha quedado activado, espere un máximo de 2 horas. 18:15 Segunda llamada: Los canales no se ven ¿será normal?. Se repite el proceso anterior en su totalidad, pero después de que salga lo de espere un máximo de 2 horas, desobedezco y vuelvo a llamar. 18:26 Segunda llamada: Si, aunque no me he movido, he tardado 11 minutos en acabar el proceso anterior. Repito todo el proceso, ya algo cansando, pero después de marcar el DNI del titular, espero. En ese momento la alocución dice: Su tiempo estimado de espera es inferior a 4 minutos. Sin embargo tardan 13 minutos en atenderme. En ese momento, una persona con un acento muy cerrado, me atiende. Le explico lo que ocurre y me pasa con un compañero. Me sale una nueva locución (tócate los pies), con el tiempo estimado de espera inferior a 4 minutos. Tengo suerte, han sido solo 11 los minutos. Le explico lo que ocurre y me pregunta que si llamo como empresa o como particular, me lo pienso dos veces y elijo una opción. Me dice que llame a otro número. 18:55 Tercera llamada: Se vuelve a repetir punto por punto el proceso hasta que marco el DNI, tengo un rebote considerable. Pese a que el tiempo estimado de espera es inferior a 4 minutos, ahora tardan 18: Estoy hasta las narices. Armándome de paciencia, procuro no vocear a la persona que me atiende, pese a que casi no la entiendo. Me pasa con un compañero. Otros 15 minutos de espera, pese a que dice que son menos de 4. El tono de mi voz es ya elevado. En ese momento me informan de que el asistente virtual de la primera llamada, no funciona y que he de contratar de nuevo. Pero, mira tú por donde, ella no lo puede arreglar. Me pasa con un comercial, que después de 9 minutos de espera me atiende, hasta que se corta la comunicación. 19:43 Cuarta llamada: A estas alturas, me da igual ver el fútbol o no verlo. Mi teléfono casi me quema la oreja y se está quedando sin batería. Sin embargo mi orgullo me impide dejarlo. Repito la operación hasta el DNI, son solo 6 minutos en lugar de los 4 prometidos. Explico y vuelvo a explicar a 3 personas distintas, con varias y sucesivas esperas. He de hablar con la cara torcida, puesto que he tenido que enchufar el móvil que empezaba a quedarse en las últimas y el cable no es muy largo. Llevo 48 minutos al teléfono y me avisan para cenar. Pero no desfallezco. Supero el hambre, cuando me dicen que me tienen que grabar la contratación y me pasan con otras 3 personas por motivos de seguridad. 21:16 Durante la cuarta llamada. Me he enfadado y desenfado tres o cuatro veces. He soltado tacos como un poseso e incluso aunque me pese he faltado al respeto a mis interlocutores, pero lo he logrado. Sin embargo, después de la contratación, me pasan con una nueva locución que me dice que la instalación se producirá entre las 10:00 y las 12:00 del próximo 17 de octubre. En ese momento, no sé qué hacer, si darme de baja, dejarlo estar, hacerme del Barça o del Rayo que no juega Champions. En casa han terminado de cenar. Derrotado me siento a la mesa. Mi hija me mira, se ríe y me dice: Tranquilo, ya he hablado yo con un compañero del Insti, que conoce una plataforma web china, donde podemos ver el fútbol gratis y sin llamar a ningún sitio. En ese momento, la miro, me río y pienso que menos mal que, como abogado soy un colaborador de la justicia y por tanto, no puedo recomendar algo que se salga de la legalidad. Puesto que tengo claro que si pudiera hacerlo, recomendaría a todo el mundo que buscara en internet estas plataformas y no contratara el fútbol de pago. Sin embargo no lo hago. Que la fuerza os acompañe.