Domingo de campaña
Aunque hasta hoy no se firmará el decreto de convocatoria de las elecciones, como exige la ley para hacer oficiales los comicios del próximo 22 de mayo, este fin de semana se ha podido considerar como el pistoletazo de salida de los candidatos castellano-manchegos de los partidos mayoritarios. Por un lado la secretaria general del PP y presidenta del partido en Castilla-la Mancha, María Dolores Cospedal, aprovechaba la reunión de la Comisión Mixta de Economía y Empleo del PP en Guadalajara, para anunciar que, si llega a presidir la Junta de Comunidades, desarrollará una ley presupuestaria que establezca techos de gasto y de endeudamiento; y por otra, el presidente regional, José María Barreda esbozaba en Alcázar de San Juan cuáles serán las líneas generales de su propuesta electoral para los próximos cuatro años. Arropado por más de 6.000 personas y contando con el respaldo de los dirigentes máximos del partido como el vicepresidente y ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba; el presidente del Congreso, José Bono; la ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar; el presidente de Aragón y secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias y el presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, entre otros, el candidato socialista aseguraba que quiere seguir gobernando para "seguir construyendo uno de los mejores sistemas" sanitarios, educativos y sociales. En cuanto a Guadalajara, Barreda también dejo claros compromisos que durante los últimos meses viene repitiendo: por un lado que no quiere el Almacén Temporal Centralizado para esta tierra y por otro defendió que se debe garantizar una lámina de agua permanente en los pantanos de Entrepeñas y Buendía. Propuestas claras y concretas que no se han escuchado en la boca de otros candidatos, y que suponen una clara diferencia, al menos, en lo que se refiere a cómo afrontar la campaña.