Don Atilano se retirará a Buenafuente del Sistal

El nuevo obispo de la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara, Julián Ruiz Martorell, tomará posesión de su cargo el 23 de diciembre, en un acto solemne que tendrá lugar en la catedral de Sigüenza y al que asistirá el nuncio del Papa en España. La tradición es que el nuevo obispo haga su entrada a lomos de un borrico o mula blanca (Atilano Rodríguez lo hizo a caballo), y así se espera hacer, aunque todavía faltan por concretar muchos detalles.

Hasta ese día, el obispo saliente, Atilano Rodriguez, ejercerá como obispo en funciones, cargo que oficialmente se denomina Administrador Apostólico de la Diócesis y del que ha tomado posesión esta misma mañana, nada más hacerse oficial el nombramiento del nuevo obispo.

Una vez finalice esta tarea, don Atilano se retirará, de momento, a Buenafuente del Sistal, donde se dedicará a “rezar un poco más de lo que lo hacía hasta el presente, leer y atender a las parroquias rurales de la zona. Seguro que me encontraré muy a gusto”, según ha indicado. “Podía regresar a mi tierra, a Asturias, pero como me encuentro bien en Sigüenza-Guadalajara he pensado que en lugar de regresar podía quedarme aquí”, añadía en rueda de prensa.

Atilano Rodríguez lleva doce años como obispo de Sigüenza-Guadalajara. El 1 de octubre de 2021, al cumplir los 75 años, presentó, como marca el código de derecho canónico, su renuncia al Papa. Ahora, este la ha aceptado.

Echando la mirada atrás, Atilano Rodríguez recuerda con emoción su toma de posesión, rodeado de mucha gente y de amigos y familiares, y aunque esperaba este relevo, no puede evitar que “mi corazón experimente en estos momentos un cierto desgarro por lo vivido, compartido y celebrado por vosotros”, confiesa.

En este sentido, da gracias a Dios “porque me ha acompañado con su amor y su gracia en las distintas responsabilidades que me fueron confiadas a lo largo de la vida, pero, de un modo especial, por las experiencias humanas y espirituales vividas durante estos doce últimos años en la querida Diócesis de Sigüenza-Guadalajara”.

Sobre el nuevo obispo, ha destacado que es una “persona humilde y con una gran formación intelectual, espiritual y pastoral”. Asimismo, ha indicado que su experiencia en la pastoral rural en la Diócesis de Huesca le servirá también para la de Sigüenza-Guadalajara.

Por su parte, el nuevo obispo, Julián Ruiz Martorell, ha remitido una carta de saludo a la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara en la que se muestra agradecido al Papa Francisco por la nueva responsabilidad encomendada. “La confianza que deposita en mi persona me anima en estos momentos en que se hace más consciente y viva la responsabilidad de ser enviado como pastor, en nombre de Cristo, para cuidar de una porción del pueblo de Dios”, indica.

En esta misiva avanza que continuará “acompañando, alentando y promoviendo los trabajos sinodales” que esta diócesis está llevando a cabo. Y es que a él le corresponderá decidir si continuar, paralizar o cambiar el rumbo del Sínodo Diocesano en el que se lleva trabajando los últimos años.