El agua, la sequía y la concienciación
11/03/2012 - 00:00
Los meteorólogos consideran que la situación de sequía que afecta a España se suele producir con una regularidad de diez años y que el fenómeno es aleatorio y no guarda relación con el fenómeno global de cambio climático. Todos podemos atestiguar que cada cierto tiempo vivimos una sequía y que una vez superada parece que se nos olvida que este efecto climátologico puede volver a repetirse. Sin embargo, ocurre de nuevo y de nuevo nos echamos las manos a la cabeza para ver de qué modo se solventan sus lamentables efectos sobre la agricultura y la ganadería, y sobre todo para asegurar el consumo doméstico. Precisamente para resolver este último punto, y ante el descenso del nivel de Beleña a 24,22 hectómetros cúbicos (por debajo de las reservas mínimas exigidas por la Confederación Hidrográfica del Tajo para esta época del año) la Mancomunidad de Aguas del Sorbe ha decretado la prealerta lo que implica el inicio de los trabajos para poner a punto el bombeo de emergencia desde Maluque. La decisión no está exenta de polémica si tenemos en cuenta que desde el PSOE reclamaban, que además de mantener este sistema de emergencia, se den los pasos necesarios para utilizar la tubería que lleva agua desde la presa de Alcorlo, en el Bornova, hasta Mohernando. Pero más allá de la resolución de este conflicto puntual, de una u otra manera, lo que ahora se plantea es que hay que ir más allá. Cada vez es más habitual que los ciclos de carencia de lluvias sean más largos. De hecho la MAS ya activó alertas en 2002, 2005 y 2009 años en los que la población y el consumo han ido creciendo de forma exponencial (la Mancomunidad suministra agua potable a 380.000 habitantes del Corredor del Henares). De ahí la necesidad de que la concienciación sobre la correcta utilización de este recurso se hace fundamental, especialmente en estos periodos de escasez de este preciado elemento. La MAS debe seguir apostando por las campañas educativas dirigidas a escolares y población general que lo que pretenden es el uso adecuado del agua evitando el despilfarro. Pero de poco sirven estas iniciativas si no nos concienciamos, de verdad, de lo preciado de este bien.