El anonimato de la red de redes y los estafadores

24/04/2012 - 16:19 Redacción

Cada día escuchamos o leemos noticias más o menos escandalosas sobre los fraudes que se producen en Internet. Un aluvión de información, muchas veces bastante poco concreto y distorsionado por el desconocimiento, pero que provoca un fuerte impacto de consecuencias muy dañinas para la credibilidad de la Red. Es cierto que se producen estafas, aunque no son únicamente los cibercomerciantes los responsables, ya que también hay muchos internautas que se aprovechan de las deficiencias legales existentes en el comercio electrónico para sacar partido ilegal. Un ejemplo de ello es la estafa que llevó a cabo un vecino de Guadalajara que ha sido detenido por la Policía Nacional. El denunciante manifestaba haber sido objeto de una presunta estafa a través de Internet en el intercambio de material por un importe total de 840 euros. Realmente  no hay mucha diferencia entre lo que hacen los estafadores en Internet y lo que se ha estado haciendo en la vida real durante muchos años. La única diferencia es que en la Red las cosas pueden hacerse sin dar la cara, por lo que el riesgo es menor y desaparecer mucho más sencillo. La receta para no caer en las manos de estos siniestros personajes: comprar exclusivamente en sitios web de confianza, y huir como de la peste de aquellos que ni siquiera dan su dirección real o su número de teléfono. Toda precaución es poca y más aún cuando los delincuentes se ocultan en el anonimato de la red.