El compromiso cumplido de Cospedal

09/07/2011 - 00:00 Redacción

A escasos días de que se cumpla el sexto aniversario del fallecimiento de once miembros del retén de Cogolludo como consecuencia del incendio más dramático que ha vivido la provincia, la presidenta regional, Mª Dolores de Cospedal se reunía ayer, con nueve familias de los fallecidos. El objetivo, cumplir con la palabra dada. De hecho, se trataba de la primera visita de la presidenta castellano-manchega a Guadalajara  y, además, era un modo de poner de manifiesto, de nuevo, que es una mujer que cumple con los compromisos adquiridos. Éste, era uno de ellos. Ya lo dijo en su discurso de investidura, en el que se refería a los retenes como los “once héroes”: “No hay distinciones de reconocimiento posible que puedan superar su inolvidable sacrificio”, apuntaba el pasado 20 de junio . Por eso, y para evitar suspicacias posibles, la popular se mantendrá al margen del homenaje previsto para este fin de semana. Más que su presencia, las familias agradecen tener de su parte a la nueva presidenta. No es la primera vez que Cospedal se pone de su lado. Durante todos estos años, han sido constantes sus muestras de apoyo. Hay que recordar, por ejemplo, que un año después del dramático suceso, acudía acompañada del presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, a la iglesia del Fuerte de San Francisco, en el primer acto institucional de homenaje que se les ofrecía. Al año siguiente, la que entonces era líder popular en la oposición,  volvía a la capital para asistir a la inauguración de una glorieta en el barrio de Aguas Vivas, promovida por el Ayuntamiento capitalino, para mantener viva la memoria de los retenes. La última ocasión en la acudía a Guadalajara para recordar a las víctimas era el 17 de julio del año pasado, con motivo del quinto aniversario de la tragedia. Pero además de con su presencia,  los afectados siempre han contado con los argumentos populares críticos a la gestión realizada desde la Junta en este asunto. Ahora las tornas han cambiado y Cospedal parece estar dispuesta a remediar lo que ella misma ha calificado en más de una ocasión como una “injusticia”.