El deporte y su repercusión

15/11/2013 - 00:00 Redacción

 
 
En un momento como el actual hablar de 25 puestos de trabajo y más de dos millones de euros empleados en consumo directo, en unos pocos días, es más que una buena noticia. De hecho, la pasada semana Guadalajara dejaba a un lado el pesimismo de la situación económica interiorizada durante años para dar paso a la algarabía y derroche comprador de las miles de personas, casi todos extranjeros, que aterrizaron en la capital y alrededores con motivo de la celebración del VIII Campeonato Mundial de Karate. Cuatro días en los que tiendas, hoteles y restaurantes han hecho su particular agosto en pleno mes de noviembre. El evento ha sido todo un acierto por parte del Ayuntamiento capitalino.
 
   Pocas veces se ha colgado el cartel de no hay billetes en el Palacio Multiusos donde se celebró la competición y mucho hay que volver la vista atrás para recordar establecimientos a rebosar con filas, incluso, para pagar. Es la bonanza del turista que tarjeta en mano vino dispuesto a gastar para disfrutar de una estancia de ensueño. Sin restricciones y, por supuesto, sin pensar en apretarse el cinturón. De ahí, el balance positivo. Pero más allá de esa predisposición gastadora que se convirtió en cajas de miles de euros, Guadalajara demostró el pasado fin de semana que está capacitada para encabezar eventos de estas características y que en su organización cuenta con los de casa convirtiendo estas competiciones en un factor dinamizador de la economía. No olvidemos que el deporte mueve mucho dinero y que, esa condición va más allá del fútbol aunque sea el más rentable. En este caso, la inversión realizada por las administraciones, Junta de Comunidades, Diputación y Ayuntamiento capitalino ha generado el efecto esperado: su repercusión directa en Guadalajara y la provincia. De ahí, las altas expectativas puestas por los comerciantes y empresarios, en la próxima celebración del Campeonato de España de Gimnasia Rítmica. Seguro que no defrauda.