El paro ‘sufre’ síndrome vacacional

Otra vez el mercado laboral da una aparente buena noticia que no es tal. El paro bajó en julio en nuestro país. Las oficinas de empleo contaron 27.814 personas menos. La afiliación a la Seguridad Social creció, 4.896 trabajadores más, según los datos que ha publicado el Ministerio de Empleo. Cifras muy anémicas, sin embargo, para un mes que suele ser bueno para el empleo, incluso cuando vienen mal dadas. El balance final de este mes es aún peor que en 2009 —el año donde se esconde el epicentro de la crisis—. Entonces el paro cayó en poco más de 20.000 personas, pero la Seguridad Social contó con 50.000 afiliados más.
Las cifras del mes pasado confirman que esta nueva recesión, como la anterior, se está cebando con el mercado laboral. La recaída ha sido tan dura que no ha permitido un alivio significativo en la mejor época para el empleo. Guadalajara, al igual que Castilla-La Mancha es un buen ejemplo. El paro subía en la región contradiciendo la tendencia nacional, en 2.641 personas, un 1,09 por ciento con lo que el registro de desempleados castellano-manchegos registra 245.464 parados de los que 115.935 son hombres y 129.529 son mujeres. En Guadalajara,  el número de parados se incrementó en un 0,44 por ciento, lo que hace un total de 23.338 desempleados en este mes de julio. En cuanto a los autónomos, en la provincia se han registrado Guadalajara un descenso de 33 autónomos, un 0,2 por ciento menos. Ni el verano, ni las vacaciones han dado una alegría continua.