El Pleno Municipal reprueba a Antonio Román y Jaime Carnicero por el acoso laboral a Araceli Muñoz acreditado por el TSJCM
Sara Simón ha expuesto que la reprobación era necesaria puesto que “si no estaríamos diciendo que el responsable es el Ayuntamiento de Guadalajara”.
Jaime Carnicero y Antonio Román han sido reprobados por el Pleno Municipal del Ayuntamiento de Guadalajara. La moción, presentada por el Grupo Municipal Socialista y defendida por su portavoz, Sara Simón, ha salido adelante con 11 votos a favor y 4 abstenciones, por lo que, tanto Carnicero como Román quedan señalados públicamente tras la sentencia del TSJCM.
Durante su defensa, Simón ha señalado a Román y Carnicero como principales responsables del mobbing sufrido por Araceli Muñoz cuando pidió su reincoporación a su puesto en el Ayuntamiento de Guadalajara en el año 2012. Simón ha expuesto que el pleno municipal solo tenía dos opciones: “pedirle a las personas que ejercieron este hostigamiento y acoso laboral que pidan disculpas”. En la misma línea, la portavoz socialista ha exigido al Pleno municipal que se señale a los responsables del moobing porque si no “se les señala, no se les afea esa conducta, lo que estamos diciendo es que el responsable es el Ayuntamiento de Guadalajara”
La propia Simón ha exigido a Jaime Carnicero que “en nombre del Partido Popular pida disculpas a una funcionaria municipal a la que acosó y hostigó porque no le gustaban sus ideales políticos”. Para Simón no existe debate alguno y que era el momento idóneo para “limpiar el nombre del Ayuntamiento de Guadalajara”.
Además, Sara Simón, tras las acusaciones vertidas por parte de otros grupos políticos, ha expresado sorpresa, y ha recordado que “no hay ningún informe de los técnicos” diciendo que una funcionaria tendría que ir a un despacho sin teléfono, ordenador ni medio alguno. La portavoz ha vuelto a reclamar disculpas por parte de Carnicero por “mandar a una funcionaria municipal al hospital por militar en un partido político”.
Araceli Muñoz sufrió acoso laboral
La sentencia del TSJCM recoge que Araceli Muño sufrió hostigamiento, acoso laboral y moobing por parte de la anterior corporación municipal. En su informe, la jueza señala que la funcionaria municipal sufrió un estado de ánimo depresivo, disminución del apetito con pérdida de peso o dificultades para conciliar el sueño.
La propia sentencia señala que la actuación del anterior gobierno del Ayuntamiento de Guadalajara se incardina, de lleno, en el denominado acoso laboral y hostigamiento y responde a una clara animadversión contra Araceli Muñoz por rivalidad política, por su ideología y por sus cargos políticos desempeñados.
Cabe recordar, que los hechos se remontan a 2012 cuando Muñoz solicitaba su reincorporación al Ayuntamiento de Guadalajara a su plaza de letrada, momento en el que fue apartada y arrinconada por el equipo de Gobierno presidido por el ex alcalde Antonio Román. La Justicia reconoce el episodio de acoso y, al tratarse de la vía de lo contencioso administrativo, condena al Ayuntamiento de Guadalajara al pago de 13.709 euros.