El Serranillo y sus investigaciones
Aunque casi todo el mundo al pasar por la carretera de Fontanar, sabe de la existencia del Centro Nacional de Mejora Forestal El Serranillo, pocos conocemos en profundidad el trabajo que allí se realiza. Creado en 1985 como centro soporte nacional para la producción de semillas forestales, posteriormente se le ha considerado como lugar adecuado para el desarrollo de programas de I + D, de forma especial en el ámbito de la mejora y el desarrollo forestal. Y ésto, que podría parecer algo ajeno a nuestra rutina diaria, se puede llegar a convertir en la salvación de muchos de nuestro pueblos. De hecho, la posibilidad de mejora de la economía rural, pasa por el aprovechamiento en conjunto de todos sus recursos. De entre ellos, cobran cada vez más relevancia los hongos comestibles, tanto por ser fuente de un turismo especializado -con los beneficios que conlleva en el sector de servicios-, como por el alto valor de las setas en el mercado, lo que posibilita un sobresueldo en la economía doméstica de zonas rurales. Dentro de las líneas de investigación que se llevan a cabo en El Serranillo destacan las orientadas a la busqueda de la rentabilidad económica del bosque, lo que en una provincia como la nuestra vendría a abrir un amplio horizonte de futuro para muchos de los municipios que ahora no encuentran un futuro claro para sus jóvenes. En concreto lo que se quiere conseguir es la plantaciones de árboles productores de hongos comestibles, como el níscalo, boletus, trufa o amanita. Estos cultivos permitirían obtener un rendimiento económico de espacios que en la actualidad no se utilizan para este fin y que servirían como complemento a otras actividades agrícolas. Ya se está haciendo con la trufa en muchas provincias de España, entre ellas Guadalajara, con lo que estos estudios vendría a ampliar un abanico de posibilidades que también se extienden a otros productos como la bellota. Se abre de este modo un a nueva vía, a través de la investigación forestal, que podría convertirse en un buen comienzo para evitar la despoblación de muchos núcleos ahora casi en el olvido.