El teatro Buero Vallejo

14/12/2012 - 00:00 Pedro Villaverde Embid


 
  El cierre del Coliseo Luengo fue una de esas desgracias culturales que deberían haberse evitado por privar al centro urbano de una gran sala de teatro y espectáculos con sabor a historia, algo que aún, y no siendo comparable, se puede todavía hacer, si la política quiere, con el Teatro Moderno, el mayor acierto de la Guadalajara moderna, amén de la ubicación de un Corte Inglés que ha dinamizado el ocio y el consumo, fue la construcción del teatro auditorio Buero Vallejo, junto a la pequeña Universidad que tiene nuestra ciudad. Es un espacio moderno, abierto, luminoso, atractivo arquitectónicamente hablando, de dudosa acústica para algunos entendidos, pero amplio y cómodo para el público (salvo para el que tiene que levantar a diez butacas si tiene que ir al servicio en medio de una función, en lo que nos parece un fallo de diseño). La acertada gestión de su buen director- bien rodeado- y una atractiva programación con grandes conciertos y representaciones, ha hecho posible en Guadalajara tardes de espectáculos hasta entonces impensables. Cuando se ideó, proyectó y ejecutó esta magna obra eran otros tiempos, aquellos en que había dinero y alegría, en los que muchos sueños se hacían realidad, en los que todo era crecimiento y se pensaba a lo grande.
 
  Pero lo cierto es que se hicieron cosas bien y una de ellas es esta infraestructura, joya del patrimonio cultural, que debemos fundamentalmente a un político, al que hoy queremos destacar. Es el que fue, a nuestro entender, un buen alcalde de Guadalajara, el jadraqueño José María Bris Gallego. Un político vocacional, incansable trabajador- aún es hoy presidente del Parque Natural de la Sierra Norte- que supo mantener una aceptable, incluso buena, relación institucional con la Junta de Comunidades del por entonces invencible Bono. Nunca olvidaremos el detalle de la tarta con la que el presidente regional felicitó por sorpresa un cumpleaños al alcalde Bris, foto de lo que debería ser el talante entre regidores por encima de las siglas y los partidismos. El teatro Buero Vallejo cumple este 20 de diciembre diez años de aciertos, el primero de ellos el dedicarlo a la memoria del mejor dramaturgo que ha dado Guadalajara. Felicidades y que durante muchos años la gente de Guadalajara pueda disfrutar de esta instalación.