En España solo quedan dos salones chinos... y uno está en Guadalajara
El Gobierno de Castilla-La Mancha está trabajando en el desarrollo de un proyecto, que será realidad a lo largo del próximo año, encaminado a mejorar las prestaciones, los usos y los servicios de los parques arqueológicos, los yacimientos y los monumentos visitables.
Dicho proyecto se centrará en aspectos como: la transición verde y sostenible, con la instalación de espacios de descanso y sombra; la eficiencia energética, con la dotación de equipos fotovoltaicos e iluminación eficiente; la transición digital, con la mejora de los recursos web y la instalación de sistemas de videovigilancia; y la competitividad, con la puesta en marcha de experiencias de realidad aumentada.
La iniciativa es una de las tres líneas de actuación, junto a la Orden de Investigación del patrimonio arqueológico y paleontológico y los proyectos de recuperación del patrimonio financiados con fondos europeos, que ha hecho posible incrementar el presupuesto de Cultura en el área de Patrimonio Artístico
Cabe señalar que el mismo ha crecido un 25 por ciento con respecto al pasado ejercicio, alcanzando la cifra de 24,5 millones de euros. Además, se ha incrementado un 146 por ciento si lo comparamos con 2014.
Así lo ha informado el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Amador Pastor, en una visita que ha realizado al recién declarado, como Bien de Interés Cultural (BIC), Palacio de los Marqueses de Villamejor de Guadalajara. En la misma, ha estado acompañado del delegado de la Junta en Guadalajara, José Luis Escudero; y el delegado provincial del ramo, Ángel Fernández- Montes; entre otras autoridades presentes.
En su intervención, el consejero ha puesto el acento en esta declaración, más que merecida por su potencial patrimonial, y ha recordado que responde al compromiso del Gobierno castellanomanchego de reconocer un inmueble que constituye un excelente ejemplo de los caserones residenciales que la clase pudiente de la ciudad construyó durante la edad moderna.
El antiguo palacio de los marqueses de Villamejor, también conocido como Palacio de la Cotilla, es uno de los escasos ejemplos que quedan en la ciudad de Guadalajara de la arquitectura civil del siglo XVII. A día de hoy, es titularidad del Ayuntamiento y se utiliza como escuela municipal de arte.
Se trata de un monumento con fachada de estética barroca, el estilo imperante en la arquitectura civil de la Corte, cuyos muros exteriores se construyeron con aparejo toledano. Esta forma de construcción es en sí misma un valor del edificio porque, aunque aún se conserva en algunos edificios religiosos, han desaparecido prácticamente todos los ejemplos en arquitectura civil.
La habitación más singular de la construcción, el denominado ‘salón chino’, cuenta con una decoración ornamental pintada sobre papel de arroz procedentes de los talleres de la China de la dinastía Quing (1644-1911). Se trata de una estancia de gran excepcionalidad artística, ya que es uno de los escasos ejemplos que se han conservado en países occidentales. En España, solo existe otro ejemplo en Almagro.
Compromiso con las protecciones
Por último, Amador Pastor ha destacado el alto compromiso del Gobierno regional con los bienes patrimoniales y ha recordado que, desde que está al frente Emiliano García-Page, se han declarado un total de 52 bines entre inmateriales, materiales y patrimoniales.