Gestesa F.S. algo más que un club deportivo
01/10/2010 - 09:45
Carta al director
ENRIQUE LARGACHA / Coordinador Area de Juventud y Deporte de la Diputación Provincial
Como Coordinador del Área de Juventud y Deporte de la Diputación Provincial de Guadalajara he tenido la oportunidad, por segundo año consecutivo, de acompañar, en representación de la institución organizadora, a las distintas expediciones que se han conformado para completar el denominado II Tour Provincial Gestesa-09 de la Diputación Provincial
Y desde la posibilidad objetiva que me permite dicha experiencia, quiero hacer una serie de consideraciones que me parece de justicia reseñar para conocimiento de la opinión general.
Lejos de comentar la actuación deportiva (que de eso se encargarán perfectamente los redactores deportivos de los medios) quiero felicitar a los dirigentes del club y muy especialmente a los técnicos y monitores del Club Gestesa de Fútbol-Sala, por la filosofía deportiva con la que se sienten identificados, amén de por el amor a unos colores y a un escudo al que respetan y quieren y que representa a la capital y la provincia de Guadalajara
Como saben, a cada una de las poblaciones que se han visitado (al igual que ocurriera el pasado año) se desplazaba, junto al equipo senior de División de Honor Nacional, uno de los equipos de las distintas categorías de base del club (Pre-benjamines, alevines, infantiles o cadetes), con lo que ello supone de satisfacción para los peques, pudiendo viajar junto a sus jugadores preferidos. El espejo en el que muchos se miran y en el que tienen puestas todas sus ilusiones.
Pero lo más interesante es como los técnicos y monitores, capitaneados por el primer entrenador, Andreu Plaza, y el jefe de expedición, Antonio Moraga cuidan y miman hasta el último detalle del viaje, de los enfrentamientos deportivos, de la forma de comportarse, de la educación y el respeto que deben tener con el rival y con la población que les recibe. De la disciplina, razonada, con que se desenvuelven en cada una de las ocasiones. Estoy convencido que la labor de todo una temporada, con el premio final de estos viajes, propicia que conozcan mejor el esfuerzo en común, la lucha dura en conjunto y la satisfacción del deber cumplido, más allá de que el resultado sea uno u otro, aún a sabiendas de que a todos les gusta ganar. Pese a pecar de romántico, quiero dejar bien claro que el equipo, la totalidad de chavales que componen el club, desde el más pequeño de los pre-banjamines y hasta el más veterano de la primera plantilla, están todavía en edad de aprender, de seguir sumando conocimientos de una especialidad deportiva que aman y a la que no deben traicionar. Cualquiera que sea el resultado final de un marcador, lo importante es acabar satisfechos con lo realizado, orgullosos consigo mismos y conjurarse para hacerlo mejor cada día. Ese es el fin y la pretensión final. Después el que vale para otras empresas mayores tendrá su oportunidad, no hay que desquiciarse, pero mientras todo eso llega, los jugadores deben ser agradecidos y fieles a un colectivo, a una escuela, a un club donde llevan muchos días de esfuerzo, muchas horas de dedicación y trabajo y devolverle un poco de lo conseguido en justa reciprocidad.
Muchos pensarán que el Gestesa F.S. les ha dado poco a los muchachos, pero no todo consiste en una equipación, una mejor instalación o un bocadillo en los desplazamientos, que también, sino en el trabajo coordinado que se ejecuta en el club para transmitir unos conocimientos deportivos, para dar a conocer una filosofía de vida, una forma de comportarse y un modo de conducirse no solo en el campo, sino, y eso es más importante, en el día a día.
No nos engañemos, los chavales, pasan más tiempo con los profesores del Colegio o del Instituto y con los del Gestesa que con sus padres y si todo ese colectivo no es el adecuado, mal irán las cosas. Por todo ello, por su forma de trabajar, por su forma de hacer y por su forma de educar a los hombres del futuro próximo, creo que el Gestesa es algo más que un club y en el momento en que se está jugando el porvenir económico de la entidad, eso también puede y debe tenerse en cuenta, ya que el club morado capitaneado por Santiago Ranz y Jesús Fuentes es una de las instituciones deportivas más importantes a nivel local, provincial y regional.
Lejos de comentar la actuación deportiva (que de eso se encargarán perfectamente los redactores deportivos de los medios) quiero felicitar a los dirigentes del club y muy especialmente a los técnicos y monitores del Club Gestesa de Fútbol-Sala, por la filosofía deportiva con la que se sienten identificados, amén de por el amor a unos colores y a un escudo al que respetan y quieren y que representa a la capital y la provincia de Guadalajara
Como saben, a cada una de las poblaciones que se han visitado (al igual que ocurriera el pasado año) se desplazaba, junto al equipo senior de División de Honor Nacional, uno de los equipos de las distintas categorías de base del club (Pre-benjamines, alevines, infantiles o cadetes), con lo que ello supone de satisfacción para los peques, pudiendo viajar junto a sus jugadores preferidos. El espejo en el que muchos se miran y en el que tienen puestas todas sus ilusiones.
Pero lo más interesante es como los técnicos y monitores, capitaneados por el primer entrenador, Andreu Plaza, y el jefe de expedición, Antonio Moraga cuidan y miman hasta el último detalle del viaje, de los enfrentamientos deportivos, de la forma de comportarse, de la educación y el respeto que deben tener con el rival y con la población que les recibe. De la disciplina, razonada, con que se desenvuelven en cada una de las ocasiones. Estoy convencido que la labor de todo una temporada, con el premio final de estos viajes, propicia que conozcan mejor el esfuerzo en común, la lucha dura en conjunto y la satisfacción del deber cumplido, más allá de que el resultado sea uno u otro, aún a sabiendas de que a todos les gusta ganar. Pese a pecar de romántico, quiero dejar bien claro que el equipo, la totalidad de chavales que componen el club, desde el más pequeño de los pre-banjamines y hasta el más veterano de la primera plantilla, están todavía en edad de aprender, de seguir sumando conocimientos de una especialidad deportiva que aman y a la que no deben traicionar. Cualquiera que sea el resultado final de un marcador, lo importante es acabar satisfechos con lo realizado, orgullosos consigo mismos y conjurarse para hacerlo mejor cada día. Ese es el fin y la pretensión final. Después el que vale para otras empresas mayores tendrá su oportunidad, no hay que desquiciarse, pero mientras todo eso llega, los jugadores deben ser agradecidos y fieles a un colectivo, a una escuela, a un club donde llevan muchos días de esfuerzo, muchas horas de dedicación y trabajo y devolverle un poco de lo conseguido en justa reciprocidad.
Muchos pensarán que el Gestesa F.S. les ha dado poco a los muchachos, pero no todo consiste en una equipación, una mejor instalación o un bocadillo en los desplazamientos, que también, sino en el trabajo coordinado que se ejecuta en el club para transmitir unos conocimientos deportivos, para dar a conocer una filosofía de vida, una forma de comportarse y un modo de conducirse no solo en el campo, sino, y eso es más importante, en el día a día.
No nos engañemos, los chavales, pasan más tiempo con los profesores del Colegio o del Instituto y con los del Gestesa que con sus padres y si todo ese colectivo no es el adecuado, mal irán las cosas. Por todo ello, por su forma de trabajar, por su forma de hacer y por su forma de educar a los hombres del futuro próximo, creo que el Gestesa es algo más que un club y en el momento en que se está jugando el porvenir económico de la entidad, eso también puede y debe tenerse en cuenta, ya que el club morado capitaneado por Santiago Ranz y Jesús Fuentes es una de las instituciones deportivas más importantes a nivel local, provincial y regional.