Guadalajara no olvida

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Editorial
Aunque pueda parecer que fue ayer, ya han pasado cinco años del trágico atentado islamista que acabó con la vida de 192 personas e hirió a otras 2.000. A toda la sociedad se le encoge el corazón y se le parte un alma que, con el tiempo, va perdiendo la unidad con la que aquél fatídico 11 de marzo de 2004 afrontaba el peor ataque terrorista de la historia de España. A las críticas de muchas de las víctimas, que dicen haber caído en el olvido de las administraciones, se suma un encontronazo político en Madrid, que ha mermado la presencia institucional en el homenaje oficial y que deja un cierto sabor amargo en el aire.
En Guadalajara, no se olvida y el dolor supera los enfrentamientos partidistas. A diferencia de nuestros vecinos madrileños, la unidad se mantiene. Prueba de ello es que en Azuqueca, los portavoces de los tres grupos políticos municipales (PP, PSOE e IU), y representantes de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y de la Diputación provincial depositaron un ramo de flores junto al monolito que recuerda a las víctimas de los atentados situado frente a la estación del ferrocarril. También Alovera quiso rendir su homenaje público al recuerdo de estas víctimas, y aquí también la unidad política se dejó sentir. Éstos fueron de los pocos actos que mostraban públicamente el dolor que todavía sienten la sociedad al recordar a los alcarreños que perdieron la vida en aquellos trenes. Un recuerdo que, de un modo u otro, todos mantenemos vivo. Todavía permanecen en nuestra memoria aquellos que, a pesar de no conocer, se convirtieron en parte de nuestras vidas. Ayer, el tren no era el de todos los días. Seguían faltando ellos y el silencio inundaba su vacío. Ayer, era un día para el recuerdo, sin grandes actos masivos, con pocas flores y con escasas velas pero con el mismo sentimiento de dolor e impotencia que entonces.