Guadalajara tiene una corazonda
01/10/2010 - 09:45
Editorial
Cuando mañana a las 18.30 horas el presidente del COI (Comité Internacional Olímpico) dé a conocer el nombre de la ciudad que organizará los Juegos Olímpicos de 2016 muchos serán los corazones rotos. Mientras, los ciudadanos en todo el mundo -y sobre todo los de los cuatro países aspirantes: Estados Unidos, Brasil, Japón y España se mantienen a la espera.
Aunque Madrid se juega mucho, también lo hace en sus manos España y la capital alcarreña. No hay que olivar la cercanía de Guadalajara a la ciudad que aspira a convertirse en sede olímpica. Si Madrid gana las Olimpiadas será un importante punto dinamizador de la economía que afectará a muchas empresas y autónomos. Pero no se puede olvidar el ejemplo de Barcelona. Entre 1987 y 1991 el número de puestos de trabajo destinados a la construcción de infraestructuras olímpicas se incrementó en 33.000. No sólo eso sino que, además, en el sector hostelero el incremento fue de unos 20.000 puestos de trabajo que, aunque limitados a las semanas de celebración de los Juegos, vinieron a dinamizar un sector que se modernizaría y adquiriría un prestigio de carácter mundial. No en vano el número de turistas que acudió a la ciudad fue de entorno a un millón y medio de visitantes. Por todo ello es fácil deducir que la organización de un evento de estas características tiene un carácter potenciador de la economía, pero en esta ocasión hay que sumar un efecto psicológico muy importante ya que transmitiría un optimismo del que está falto el sistema económico español. Por eso es trascendental para Madrid conseguir estos Juegos, pero también lo es para nuestra capital, que en más de una ocasión ha expresado su absoluto apoyo a la candidatura. Guadalajara es Ciudad Amiga de Madrid 2016 desde el pasado 11 de junio, y todavía hoy mantiene la corazonada de conseguir un pequeño pellizco de los Juegos Olímpicos al haber puesto a disposición de la candidatura olímpica las infraestructuras deportivas y hoteleras de la capital.