Han tomado el camino equivocado

18/11/2012 - 00:00 José Morales Martín

 
 
 
   Pasada la segunda huelga general en menos de un año, en este caso convocada sin motivos laborales, lo que sí debe quedar claro, por respeto a la ley y a los derechos de todos los ciudadanos, es que la huelga no es un deber de obligado cumplimiento. En el ejercicio de su libertad los ciudadanos españoles debemos poder elegir, sin coacción, si queremos o no queremos secundar una huelga, especialmente esta. En un país democrático que se precie, está fuera de lugar cualquier medida violenta o de presión que altere los servicios mínimos regulados, así como la tranquilidad de cualquier persona o establecimiento que no quiera secundar la huelga, desgraciadamente, una vez más, este derecho no todos lo han podido ejercer.
 
   España vive una crisis sin precedentes que requiere sacrifico, trabajo compartido, solidaridad y altura de miras. Las políticas de un Gobierno deben ser sometidas a debate y a crítica, pero pienso que esta huelga en nada ayudaba a mejorar  la situación. Señores del PSOE, de los sindicatos, de clase o de partido que no de profesionales, en esta ocasión han tomado el camino equivocado.