La Dieta Mediterránea podría ser Patrimonio de la Humanidad
01/10/2010 - 09:45
Por: Redacción
El director general de Industrias y Mercados Alimentario del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Francisco Mombiela, y el consejero de Agricultura de la Junta de Andalucía, Martín Soler, se han reunido con representantes de Italia, Grecia y Marruecos para realizar un seguimiento de la candidatura de la Dieta Mediterránea como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, que declara la Unesco.
España, Italia, Grecia y Marruecos junto con colectivos científicos y sociales del arco mediterráneo, estudian una estrategia para potenciar la candidatura. La reunión se ha producido tres días después de que la ministra Elena Espinosa anunciase, en su primera comparecencia en el Congreso de la legislatura, que esta candidatura se presentará el próximo mes de agosto.
En la apertura de la reunión, el consejero de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, Martín Soler, ha insistido en que hay que mantener este rico legado cultural de tradiciones milenarias y ser capaces de trasmitir a los más jóvenes los hábitos saludables. Soler ha destacado que este reconocimiento es de gran interés para los países de la cuenca del Mediterráneo, puesto que ayudaría a que los productos característicos como la fruta, los cereales o el aceite de oliva llegasen a una mayor cantidad de población y a que se reconociesen como atractivos y saludables. Además ha manifestado que esta clase de iniciativas pueden contribuir a que el sector primario en su totalidad; agricultura, ganadería y pesca, sea reconocido como trascendental en la sociedad del siglo XXI.
Francia
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) deberá decidir en septiembre de 2009 la inscripción de dos listas especiales de patrimonios culturales inmateriales de la humanidad que estén amenazadas de degradación o desaparición. Por su parte, Francia ya anunció el pasado mes de febrero su intención de presentar la candidatura de su gastronomía.
En febrero de 2007 comenzó el proceso con los primeros acuerdos entre países en apoyo de la Dieta Mediterránea. Se produjeron en la cumbre hispano-italiana celebrada en Ibiza en la que España e Italia aprobaron una declaración conjunta para la protección y promoción de la Dieta Mediterránea y la defensa de la calidad y competitividad de sus producciones agroalimentarias.
En julio de ese mismo año la titular del entonces Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación presentó la iniciativa al Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea e invitó a participar en ella a todos los que lo desearan. España obtuvo entonces un amplio respaldo de los Estados miembros, de la Comisión y de la Presidencia del Consejo. Posteriormente, a iniciativa de España, se constituyó el núcleo de países que están trabajando en la redacción de la candidatura, y que está compuesto por lo antes nombrados; España, Italia, Grecia y Marruecos.
En la apertura de la reunión, el consejero de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, Martín Soler, ha insistido en que hay que mantener este rico legado cultural de tradiciones milenarias y ser capaces de trasmitir a los más jóvenes los hábitos saludables. Soler ha destacado que este reconocimiento es de gran interés para los países de la cuenca del Mediterráneo, puesto que ayudaría a que los productos característicos como la fruta, los cereales o el aceite de oliva llegasen a una mayor cantidad de población y a que se reconociesen como atractivos y saludables. Además ha manifestado que esta clase de iniciativas pueden contribuir a que el sector primario en su totalidad; agricultura, ganadería y pesca, sea reconocido como trascendental en la sociedad del siglo XXI.
Francia
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) deberá decidir en septiembre de 2009 la inscripción de dos listas especiales de patrimonios culturales inmateriales de la humanidad que estén amenazadas de degradación o desaparición. Por su parte, Francia ya anunció el pasado mes de febrero su intención de presentar la candidatura de su gastronomía.
En febrero de 2007 comenzó el proceso con los primeros acuerdos entre países en apoyo de la Dieta Mediterránea. Se produjeron en la cumbre hispano-italiana celebrada en Ibiza en la que España e Italia aprobaron una declaración conjunta para la protección y promoción de la Dieta Mediterránea y la defensa de la calidad y competitividad de sus producciones agroalimentarias.
En julio de ese mismo año la titular del entonces Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación presentó la iniciativa al Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea e invitó a participar en ella a todos los que lo desearan. España obtuvo entonces un amplio respaldo de los Estados miembros, de la Comisión y de la Presidencia del Consejo. Posteriormente, a iniciativa de España, se constituyó el núcleo de países que están trabajando en la redacción de la candidatura, y que está compuesto por lo antes nombrados; España, Italia, Grecia y Marruecos.