La Guardia Civil

11/10/2013 - 00:00 Pedro Villaverde Embid

 
   
  El 13 de mayo de 1844, Francisco Javier Girón y Ezpeleta, II Duque de Ahumada, fundó el primer cuerpo de seguridad pública de ámbito nacional en España, con carácter militar y armado. Forma parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y protege, tal y como recoge la Constitución, “el libre ejercicio de los derechos y libertades de los españoles y garantiza la seguridad ciudadana, bajo la dependencia del Gobierno de la Nación”. La Guardia Civil, bajo estas premisas, se ha convertido en toda una institución querida y valorada por la ciudadanía de manera muy particular en las zonas rurales donde la tradicional pareja del tricornio ha auxiliado mucho en averías o accidentes de coche, incidentes o perdida de personas, siendo la autoridad en múltiples actos oficiales.
 
   Sus agentes- hombres y mujeres-, que viven habitualmente en los propios cuarteles, sirven con orgullo y lealtad a unas señas de identidad que perduran a lo largo de los años pese a las transformaciones sociales y los movimientos internos que demandan un cambio del carácter de militar a civil para homologar en derechos a los miembros del cuerpo con los funcionarios de las policías nacionales y locales y para que el régimen sancionador a aplicar a posibles infracciones no sea el castrense, demasiado estricto. La AUGC, que hace años tuvo cierto auge en nuestra provincia cuando dirigía su acción José Agudo, que logró empatía con los medios de comunicación, abanderaba esta reclamación que básicamente busca la igualdad con el resto de fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en cuanto a la realidad de sus integrantes. El peso o losa de la tradición, el imperio del orden y la obediencia ha hecho a los mandos resistirse y a ningún gobierno, de derechas o izquierdas, afrontar la demanda.
 
   A los ciudadanos, por lo menos a muchos, sin aprobar los excesos disciplinarios y siempre que se trabaje en condiciones que garanticen las conquistas sociales logradas a lo largo de los años, nos gusta la Guardia Civil con su historia, su idiosincrasia y su efectividad. Son muchas las operaciones que cierra con éxito, las detenciones que práctica y la ayuda que presta a la naturaleza, el tráfico, la violencia de género y al ciudadano al que sirve. Gracias y felicidades.