La lluvia retrasa pero no impide el traslado de la Virgen hasta el Fuerte
La Virgen de la Antigua hizo finalmente en la noche de este martes su tradicional traslado procesional, aunque con retraso por la lluvia.
GALERÍA DE FOTOS: Juan Vázquez
Numerosas personas se acercaron a la puerta del santuario de la Virgen de la Antigua para acompañar a la imagen de la patrona de Guadalajara en su tradicional procesión hasta el Fuerte de San Francisco (hace pocos años a la Concatedral), donde el inicio de la Novena marca los actos de homenaje que la ciudad tributa a su alcaldesa honoraria hasta el regreso a su casa en la multitudinaria procesión del 8 de septiembre.
Sin embargo, durante mucho tiempo se temió por la viabilidad del desfile procesional por la lluvia incesante sobre la capital, que cuando parecía remitir volvía a caer con fuerza. En el interior del santuario la imagen esperaba su salida y muchos comentaban que así no podría salir a la calle. Finalmente, con más de una hora de retraso, cuando la situación se calmó, la patrona, bajo un plástico por si acaso, acompañada de menos gente por estas inclemencias que en otras ocasiones, y con el alcalde y varios concejales y cargos electos del PP en la comitiva, inició la procesión que fue más rápida que en otras ocasiones, aunque manifestó el cariño que se la tiene en Guadalajara.
La procesión del traslado supone el inicio no oficial de las fiestas de Guadalajara. En el Fuerte de San Francisco se sucederán cada tarde las Novenas en su honor hasta ese retorno en el día de la Natividad de la Virgen.
