La Sagrada Familia de Barcelona pierde 300.000 visitas en un año por la crisis
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
Mañana espera 20.000 visitas por la jornada de puertas abiertas
La Sagrada Familia es el monumento catalán que recibe más visitas --unos tres millones en 2007-- pero no es ajena a la crisis: en el último año ha perdido unos 300.000 visitantes, "muchos" pero "sólo" un 10 por ciento del total que suelen registrar al año, indicó en una entrevista con Europa Press el arquitecto director del templo, Jordi Bonet.
Las visitas descendieron "sensiblemente" tras la Semana Santa del año pasado de forma "importante" en los últimos meses del año. "Pero no nos podemos quejar", aseguró Bonet alegando que sólo representa el 10 por ciento del total, aunque muchos museos "darían lo que fuese" por 300.000 visitantes.
Las donaciones de los ciudadanos y el pago de las entradas de los visitantes --de los cuales sólo el 15 por ciento son españoles-- es con lo que se financia la obra, "que se hace porque el pueblo quiere, no con dinero de las administraciones", recalcó Bonet, que es el arquitecto director desde hace casi 25 años.
El templo hará mañana una jornada de puertas abiertas para ver la evolución de las obras en el último año. El arquitecto del templo, Antoni Gaudí, nació el 25 de junio de 1852 y murió el 10 de junio de 1926, por lo que siempre por estas fechas se celebra esta jornada.
Bonet auguró que mañana visitarán la Sagrada Familia unas 20.000 personas, la mitad de las cuales podrá asistir a la vez a misa partir de septiembre del año que viene, cuando el templo expiatorio estará totalmente cerrado, pero no acabado.
El hecho de que se empiece a hacer misa no implicará que se acoten las visitas, ya que permanentemente se rendirá culto en un pequeño espacio al final del ábside, no en el altar mayor.
En todo caso hay zonas a las que hace tiempo que no se puede acceder, y no porque haya grietas, desmintió Bonet. Es el caso de las escaleras de caracol que suben a los campanarios, demasiado estrechas como para ser seguras ante el constante ir y venir de visitantes y a tenor de las actuales normas de seguridad.
A los campanarios actualmente se accede sólo con visita guiada y mediante ascensor. Unas 1.000 personas suben a ellos a diario, y unas 150 personas de media hacen cola para subir, cifró el arquitecto.
"PARECE UN PARQUE TEMÁTICO"
A Bonet actualmente la Sagrada Familia le parece "un parque temático" porque es un lugar de culto en el que no se ejerce y únicamente transitan turistas, algunos de los cuales incluso "desconocen" qué tipo de edificio es.
La principal ventaja de que se cierre es que será por fin, 127 años después de colocar la primera piedra, "una iglesia" en la que se hará misa.
A partir del año que viene, el equipo de arquitectos se enfrentará, entre otras obras pendientes, a la construcción de la torre del cimborio central, acabada en una cruz a 170 metros de altura, punto más alto del templo. Además, esta torre estará rodeada de cuatro más, dedicadas a los evangelistas.
EL "DISPARATE" DEL AVE
La "tozudez" del Govern para que el AVE pase a pocos metros del templo y trasgrediendo su línea de entorno de protección --fijada por tener partes catalogadas por la UNESCO como Patrimonio Mundial--, es para Bonet un "disparate".
"Creen que se puede hacer todo, y el riesgo cero no existe. Es falso que si las cosas se hacen bien no pasa nada", prosiguió el arquitecto jefe, para quien no valen las opiniones de los ingenieros de túneles que el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, consultó, ya que uno es autor del túnel del metro de Colonia (Alemania) que se hundió, creando muertos, dijo Bonet.
Además, consideró "una temeridad" crear un muro-pantalla de 240 metros de largo, desde la plaza de Gaudí hasta la plaza de la Sagrada Familia, para proteger el templo de las vibraciones del paso del AVE porque la propia obra del muro provocará un movimiento "que no han analizado".
Actualmente el caso está en la Audiencia Nacional, a la que Bonet remitió la semana pasada por carta puntualizaciones de la explicación que hizo Adif de las obras, según pudo saber Europa Press.
Las donaciones de los ciudadanos y el pago de las entradas de los visitantes --de los cuales sólo el 15 por ciento son españoles-- es con lo que se financia la obra, "que se hace porque el pueblo quiere, no con dinero de las administraciones", recalcó Bonet, que es el arquitecto director desde hace casi 25 años.
El templo hará mañana una jornada de puertas abiertas para ver la evolución de las obras en el último año. El arquitecto del templo, Antoni Gaudí, nació el 25 de junio de 1852 y murió el 10 de junio de 1926, por lo que siempre por estas fechas se celebra esta jornada.
Bonet auguró que mañana visitarán la Sagrada Familia unas 20.000 personas, la mitad de las cuales podrá asistir a la vez a misa partir de septiembre del año que viene, cuando el templo expiatorio estará totalmente cerrado, pero no acabado.
El hecho de que se empiece a hacer misa no implicará que se acoten las visitas, ya que permanentemente se rendirá culto en un pequeño espacio al final del ábside, no en el altar mayor.
En todo caso hay zonas a las que hace tiempo que no se puede acceder, y no porque haya grietas, desmintió Bonet. Es el caso de las escaleras de caracol que suben a los campanarios, demasiado estrechas como para ser seguras ante el constante ir y venir de visitantes y a tenor de las actuales normas de seguridad.
A los campanarios actualmente se accede sólo con visita guiada y mediante ascensor. Unas 1.000 personas suben a ellos a diario, y unas 150 personas de media hacen cola para subir, cifró el arquitecto.
"PARECE UN PARQUE TEMÁTICO"
A Bonet actualmente la Sagrada Familia le parece "un parque temático" porque es un lugar de culto en el que no se ejerce y únicamente transitan turistas, algunos de los cuales incluso "desconocen" qué tipo de edificio es.
La principal ventaja de que se cierre es que será por fin, 127 años después de colocar la primera piedra, "una iglesia" en la que se hará misa.
A partir del año que viene, el equipo de arquitectos se enfrentará, entre otras obras pendientes, a la construcción de la torre del cimborio central, acabada en una cruz a 170 metros de altura, punto más alto del templo. Además, esta torre estará rodeada de cuatro más, dedicadas a los evangelistas.
EL "DISPARATE" DEL AVE
La "tozudez" del Govern para que el AVE pase a pocos metros del templo y trasgrediendo su línea de entorno de protección --fijada por tener partes catalogadas por la UNESCO como Patrimonio Mundial--, es para Bonet un "disparate".
"Creen que se puede hacer todo, y el riesgo cero no existe. Es falso que si las cosas se hacen bien no pasa nada", prosiguió el arquitecto jefe, para quien no valen las opiniones de los ingenieros de túneles que el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, consultó, ya que uno es autor del túnel del metro de Colonia (Alemania) que se hundió, creando muertos, dijo Bonet.
Además, consideró "una temeridad" crear un muro-pantalla de 240 metros de largo, desde la plaza de Gaudí hasta la plaza de la Sagrada Familia, para proteger el templo de las vibraciones del paso del AVE porque la propia obra del muro provocará un movimiento "que no han analizado".
Actualmente el caso está en la Audiencia Nacional, a la que Bonet remitió la semana pasada por carta puntualizaciones de la explicación que hizo Adif de las obras, según pudo saber Europa Press.