Las necesidades de los jóvenes

Si ayer hablábamos en este espacio del interés del Gobierno regional por el área educativa, hoy nos tenemos que referir a las políticas que desde el Ejecutivo de Barreda se vienen poniendo en marcha en el ámbito de los jóvenes. El hecho de que ayer la portavoz del Gobierno castellano-manchego, Isabel Rodríguez, inaugurase el Centro Joven de Cabanillas suponía según ella misma reconocía el símbolo “del compromiso con los jóvenes de la provincia”. De hecho, la inversión total para hacer realidad esta nueva instalación ha rondado los dos millones de euros, que han sido financiados por el Gobierno regional, el Injuve, y el Ayuntamiento. El Centro Joven cabanillero se convertirá de esta forma en un referente y un espacio para, el encuentro y la creatividad de jóvenes de la localidad, que cuenta con un 22 por ciento de población susceptible de poder beneficiarse de sus servicios. Y como no todo es ocio, este centro se plantea, además, como una plataforma para la formación de la población más joven, un aspecto en el que también se ha percibido un importante esfuerzo inversor en los últimos cuatro años. En ese periodo se han desarrollado acciones de formación y empleo que han beneficiado a cerca de 45.000 jóvenes de toda la región. Así, 33.000 jóvenes, entre desempleados y ocupados, han participado de los programas de formación profesional para el empleo entre 2007 y 2010, mientras que otros 1.700 jóvenes desempleados, menores de 25 años y sin cualificación, han contado con un contrato de trabajo, al mismo tiempo que han adquirido formación, a través de las escuelas taller y casas de oficio que se han puesto en marcha a lo largo de la presente legislatura. Atender las necesidades de ocio y de formación se convierte en el pilar fundamentales de una política orientada a una generación de jóvenes que se configura como la Guadalajara del futuro, y que presume de ser la más preparada de la España más reciente.