Las terrazas y sus efectos colaterales

28/03/2012 - 16:39

Con la llegada del verano, las calles y parques de la ciudad empiezan a poblarse de terrazas en las que disfrutar de los primeros rayos del sol primaveral. Sin embargo, lo que para unos es síntoma de la llegada del verano y los periodos de asueto y vacaciones, para otros se convierten en el inicio de un martirio particular. Se trata de los vecinos que se ven abocados a soportar las cálidas temperaturas veraniegas con las ventanas cerradas para poder conciliar el sueño. Y es que el ruido ocasionado por estas instalaciones y por las, ya habituales, mesas especiales para fumadores que se colocan en el exterior de los establecimientos hosteleros se ha convertido en una tónica generalizada. No hay más que echar un vistazo a las continúas denuncias y multas impuestas, que parecen no ser todo lo efectivas que el Equipo de Gobierno desearía. Con la intención de evitar estos perjuicios, el Ayuntamiento capitalino tiene previsto aprobar en el pleno del viernes dos medidas disuasorias: por un lado se establecerá un pequeño canon por las por la mesita o similar que estos locales ponen a la puerta de los negocios para, principalmente, dar un soporte a los fumadores que salen al exterior; y en segundo lugar, se castigará con mayor severidad a aquellos locales que incumplan por más de 60 minutos los horarios permitidos, para lo que se contemplan multas que, dependiendo de la gravedad de la falta, oscilarían entre los 300 y los 30.000 euros. Se trata, sobre todo de encontrar el punto medio entre el interés empresarial y el interés general de los muchos afectados por las molestias que generan estas instalaciones, aunque a nadie se le escapa que, de paso, se abre una nueva vía de recaudación que vendrá muy bien a las arcas locales en estos tiempos de crisis, ajustes y austeridad.